05/02/2023
En sesiones me encuentro a menudo con la resistencia a uno mismo y la veo expresarse de manera constante.
En el relato de mis consultantes, me piden “la receta” “para cambiar” .
“Cómo dejo de ser tan…”
“Cómo dejó de ser…”
“Cómo puedo mejorar en…”
Desde ese lugar, vivimos bajo el influjo cruel del rechazo. Tan cruel que parte de nosotros hacia nosotros. La resistencia es un conflicto, que te mantiene en la persistencia de lo que no eres. Te estanca, te frustra.
Si tu atención está en “ser diferente” a quien eres, te estás invalidando. Te estás silenciando.
Lo más amoroso que puedes hacer, es comprender-te. Date una caricia, sin juicio, plena de permisión.
Que imaginario sostienes que eres erróneo?
Podrías considerar que estás siendo condicionado por algún miedo, o por alguna distorsión que se está metiendo en tu manera de funcionar.
Y es en esa posición en la que llegarás a “la receta” de transformación que buscas.
Darle lugar, darle voz a eso es liberador. Reprimirlo es alimentarlo más y volverlo más fuerte.
Esas grietas que ves en ti, requieren amor… el amor es permisión. Ten genuina aceptación de ti y de lo que creas. Entonces verás que no estabas en la equivocación, y que siendo diferente las cosas mejoraran.
Al integrar el amor por ti, ya no hay lugar para el miedo. Miedo enmascarado de juicio, limitaciones y desaprobación.
Hay entendimiento y libertad de ser… eso naturalmente manifestará una forma de ser y hacer que te funcione.
Te animas a darte esa caricia hoy? Por un día… prueba. Ya no insistas en cambiar-te… foco total y absoluto en amar-te.
Mírate con buenos ojos
Se amable contigo
Mariann
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