
04/09/2025
La ternura también es una cuestión de hombres (y hay que trabajarla)
Desde el estereotipo de masculinidad, a los hombres se nos ha enseñado que ser fuertes, duros y parcos es parte de lo que nos define como “masculinos”. Esta narrativa cultural ha contribuido a que reprimamos actitudes naturales como la ternura, el cariño o la sensibilidad, que lejos de debilitarnos, enriquecen nuestra experiencia vital y fortalecen nuestros vínculos. De acuerdo a estudiosos sobre las masculinidades como R.W. Conell, hoy en día es urgente que los hombres cultivemos o retomemos estas cualidades para hacer frente a los desafíos sociales y emocionales que nos presenta el mundo actual.
Ser tiernos, sensibles y abiertos emocionalmente mejora nuestra salud emocional. Pero se ha comprobado que los hombres tendemos menos a buscar ayuda psicológica o hablar de sus emociones, lo que aumenta el riesgo de depresión y suicidi0. Expresar cariño no nos hace menos hombres; nos hace más humanos. Por eso, organizaciones como la Asociación Americana de Psicología, por ejemplo, ya reconoce la necesidad de revisar los mandatos masculinos tradicionales por sus efectos negativos en la salud mental.
Por eso, hoy queremos compartirte algunos datos y recomendaciones que nos ayudan a entender por qué, fortalecer y trabajar en nuestra ternura, sensibilidad y emotividad es conveniente y, contrario a lo que nos han dicho, tenemos que dejar de reprimir estos rasgos inherentes a cualquier persona.
1. La ternura mejora las relaciones.
2. La ternura construye sociedades empáticas.
3. La ternura es autocuidado y fortaleza.
¿Qué actos de cariño y ternura practicas o te hacen sentir mejor? Guarda, comparte y comenta: normalicemos que los hombres somos tiernos y necesitamos cariño.