
02/07/2025
¿De verdad quieres un hijo feliz? Entonces empieza por cuidar a su mamá.
Porque un niño que crece viendo a su madre triste, rota o agobiada por quien debería cuidarla... también se rompe por dentro, aunque no lo diga.
No puedes esperar que tu hijo sea alegre, seguro y fuerte, si su mamá vive apagada, cansada, llorando en silencio.
No puedes querer un niño lleno de amor, si su figura más importante se siente sola, desvalorizada o lastimada.
Una mamá feliz no significa una vida perfecta.
Significa una mujer que es tratada con amor, respeto y paz.
Significa una madre que puede respirar tranquila, que no vive con miedo ni se pregunta si merece lo que está viviendo.
Porque la felicidad de un hijo no se construye con regalos ni con cosas materiales.
Se construye con una mamá emocionalmente estable, abrazada, respetada y valorada.
Así que, si de verdad te importa tu hijo...
cuida a quien lo cuida.
Amala, no la agotes.
Protégela, no la hieras.
Porque cuando una mamá está bien...su hijo florece🌸