25/05/2025
Después de 2 años y medio, hoy es la tercera noche que se duerme sin teta, y yo estoy como feliz pero acongojada al mismo tiempo. No saben la cantidad de noches durante estos años que me he cansado, quejado y desesperado. Hoy, mi bebé tiene fiebre y moquitos y estoy acostada al lado de él deseando que se hubiese dormido con teta para que se sane más rápido 🙃 La teta no es solo alimento, y la necesidad de teta no es unidireccional. Ahora lo veo más claro. La teta ha sido mi compañera todo este tiempo, ha sido alimento si, pero también ha sido calma, también ha sido consuelo, también ha sido vacuna, también ha sido remedio. La teta me ha dado silencio. La teta me ha dado calorcito reconfortante que me ha devuelto al presente. La teta me ha empujado a la presencia. Ay .. tanto y más.
No se si este es el principio del final, o si solo es una fase. Sea como sea, ahora estoy pensando en documentarlo para si poder recordar cuando sea la última vez.
A este capítulo de la vida lo llamaré LA DICOTOMÍA DE LA TETA.