17/07/2025
Ayudarlos a sobrevivir
Hacer que el prematuro "sienta" que sigue en el vientre materno es un principio fundamental de los cuidados centrados en el desarrollo y la neuroprotección en neonatología. Este enfoque busca replicar, en la medida de lo posible, el ambiente intrauterino para favorecer el desarrollo cerebral, reducir el estrés y mejorar la estabilidad fisiológica y emocional del bebé.
🧠 ¿Por qué es importante?
El entorno del útero es cálido, oscuro, húmedo, con ruidos amortiguados (como el corazón materno) y movimientos suaves. El bebé prematuro, al nacer antes de tiempo, pierde ese ambiente protector y es expuesto a un mundo externo ruidoso, frío, con luces intensas y múltiples manipulaciones, lo que puede afectar negativamente su neurodesarrollo.
🧸 Estrategias para “simular el útero” en la UCIN
1. 🛏️ Contención y posicionamiento
Anidamiento con rollos o nidos: Permite mantener una postura en flexión como en el útero.
Manos contenedoras (contención manual): El contacto firme y delicado genera sensación de seguridad.
Evitar el estiramiento excesivo o posturas en extensión.
2. 🌡️ Ambiente térmico y sensorial
Termorregulación constante (incubadoras, colchones térmicos).
Luz tenue y direccionada, cubriendo la incubadora durante el descanso.
Reducción del ruido ambiental (alarma moderada, hablar en voz baja).
Evitar manipulaciones innecesarias, respetar ciclos de sueño.
3. 🤱 Contacto piel a piel (Método canguro)
Simula el calor, el latido y el olor materno.
Disminuye el estrés y mejora la frecuencia cardíaca, la saturación y el sueño.
Favorece la lactancia y el apego.
4. 🎶 Sonidos intrauterinos
Música suave, latido del corazón o grabaciones del habla materna.
Estudios demuestran que escuchar la voz de la madre reduce el estrés y mejora la maduración cerebral.
5. 🍼 Estimulación olfativa y gustativa
Exposición al olor de la madre (ropa con su olor, leche materna).
Gotas de leche materna en la boca para estimulación gustativa previa a la alimentación.
6. 👩👩👦 Cuidados centrados en la familia
Involucrar a los padres en los cuidados diarios.
Fomentar la presencia materna frecuente para que el bebé reconozca voz, tacto y olor.