18/04/2019
*_REGATA DE YOLAS
GUAYAQUIL - POSORJA:
TRAVESÍA DE VALIENTES_*
En 1940, German Abad Valenzuela
y un grupo de futuros médicos
remaron en penitencia,
de la ría hasta el océano:
De Guayaquil a Posorja,
en sin igual tradición
que a todo creyente honra.
Al filo de medianoche,
al nacer el Viernes Santo,
remeros y timoneles
direccionan pala y proa,
y al son de la Banda Blanca
desde la regia Rotonda
en el Malecón se entregan
al que sabe llevar la piola.
Son “Cuatro con Timonel”,
difícil de relevar,
que en 49 millas náuticas
por siete horas bregarán.
Con pala en la chumacera,
con ritmo de ‘lento y largo’,
pateando y espaldeando,
sorteando manchas de palo.
Cuando las yolas son muchas,
son fraccionadas en mangas
y por guías sólo tienen
la luna y lanchas de barra.
Timonel, remero y juez
con cartilla de recorrido
entenderán la marea
siguiendo la corriente del río.
Hay que coger la vaciante,
hay que ir achicando el agua;
empujando en riel el carro
por tan difícil regata:
¡La más difícil del mundo!
¡Reto que supera récord!
Trae ola, sal y densidad
a caballeros del remo.
Imaginen el camino:
Por el Guayas a Punta de Piedra,
Puerto Roma y Alcatraz,
Chupadores Chicos y Grandes,
Puerto Arturo está a la mitad
de sinuosos Callejones
y casi al llegar a Isla Verde,
¡como mancebo que crece,
nuestro río se hace mar!
Lo dulce se hace salado,
los lechuguines quedan atrás.
Monte Alto, varias piedras,
los Farallones de Puná,
Manglecito, Zapatero,
el saludar de bufeos
y unas gaviotas coquetas
te escoltan hasta la meta.
Regata de temerarios.
¡Como ésta, ninguna otra!
¡Travesía de valientes:
De Guayaquil a Posorja!
_[Poema de la poetisa ecuatoriana Karina Gálvez, de la serie "Aprendiendo Historia a través de la Poesía"]._