06/10/2024
LA IMPORTANCIA DEL CALENTAMIENTO MUSCULAR
A pesar de que el caballo es un animal con el doble de capacidad física que el hombre,la importancia del calentamiento muscular del caballo de deporte es la base para iniciar el trabajo en cualquier modalidad ecuestre que practiqueis.
El calentamiento es una técnica que tendrá una influencia directa sobre la intensidad del trabajo, las condiciones medioambientales y el grado de preparación del caballo.
Hablaremos de los beneficios que supone para éste como atleta que es. El primer efecto es el aumento de la circulación sanguínea en la musculatura en general y en las extremidades en particular. En estas últimas hay menos vasos capilares que en el resto del cuerpo del animal y son las partes más alejadas del corazón, por lo que hay que tenerlas muy en cuenta a la hora de empezar con los ejercicios de calentamiento.
Con todo ello conseguiremos una mejora de la elasticidad muscular y un aporte mayor de oxígeno y por lo tanto de nutrientes, favoreciendo la capacidad contráctil de los músculos, generando tensión y así produciendo movimiento, lo que permite al animal realizar actividades tan opuestas como estar parado o correr y sustentar las funciones de los diferentes sistemas orgánicos.
Además es muy importante esta fase de calentamiento previa al ejercicio por la simple razón de que favorecerá la concentración del caballo, actuará como un preventivo muy eficaz para evitar lesiones musculares y articulares y combatiremos fatigas musculares.
Estos ejercicios de calentamiento para cualquier caballo, independientemente de la disciplina que se pratique, deben estar basados en los manuales propuestos de equitación avanzada.
Unos 25 a 30 min. de paso aseguran un buen aumento de la circulación sanguínea en las extremidades, teniendo como resultado que el caballo será capaz de adaptarse mejor al terreno a la hora de iniciar otros aires.
También la utilización de caminadores son una buena herramienta para preparar al caballo en este aspecto ya que, entre otras cosas, aumentan la secreción de estamina, que no es ni más ni menos que una sustancia generada por el organismo del animal para que puede soportar actividades físicas.
El trabajo al paso con riendas largas y suave contacto en la mano, acompañado de la posición de cuello y cabeza largos y estirados hacia abajo (long&low) ,nos ayudará la mismo tiempo a trabajar y fortalecer la musculatura dorsal.
Pasado este período de tiempo, que siempre deberíamos respetar, iniciamos el trabajo al trote cadenciado en rectitud y casi sin presión sobre la embocadura. Este trote es excelente para tonificar la musculatura, además de dar al cuello su extensión para proyectarlo hacia delante. Aconsejables son los cambios de ritmo y medias paradas de manera que trabajaremos también la elasticidad de la columna vertebral, muy importante antes de acometer figuras de que exijan un mayor esfuerzo muscular en esa parte del caballo. También nos servirá este efecto contracción- descontracción, como si de un muelle se tratase, para poderlo llevarlo mejor en la mano "a posteriori", ya que todas las ayudas desembocan en su mandíbula, consiguiendo también una mayor y efectiva impulsión del tercio posterior. La combinación trote-paso-trote no sólo sirve para premiar al caballo durante el ejercicio, sino que también aumentaremos su concentración.
Pasaremos a los círculos al trote y figuras como vueltas inversas, directas, etc... La ejecución de los círculos de grandes ( 20 mts de diámetro ) a más pequeños concéntricamente aumentará la elasticidad de la musculatura en general, y sobre todo, la elasticidad de la columnna cuando ésta adquiera la forma de arco de bóveda.
De ahí pasaremos al galope cadenciado en rectitud de manera que el caballo avance resbalando los posteriores debajo de su masa. Así mismo, los cambios de aire galope-trote-galope trabajarán la musculatura dorsal y mantendrán más atento al caballo y los círculos mejorararán también su elasticidad.
Personalmente mi recomendación es que estos trabajos de calentamiento se realicen muy suavemente, a unos 2/3 de su capacidad máxima de esfuerzo físico.
El objetivo pues es poner en forma al caballo puesto que de esta manera, calentado muscularmente y flexible, eliminaremos posibles resistencias. Una vez establecida la armonía y calentamiento muscular del conjunto en los tres aires, pasaremos ya a los ejercicios preparatorios para afrontar las diferentes modalidades ecuestres incidiendo en la flexibilización del eje cuello-cabeza y la descontracción de la mandíbula, todo ello con la búsqueda de la impulsión.
He de anotar que la higiene, la calidad de la alimentación y del trabajo en función de la modalidad que se practique y la edad del caballo, son circunstancias que inciden directamente sobre el desarrollo y la conservación de la musculatura.