22/07/2025
La vida para mí es como la carta de la rueda de la fortuna, pasan cosas continuamente, pase lo que pase el mundo gira, la vida no es estática, cuando se produce un trauma os recomiendo acudir a un especialista, y también os pido tengáis buenos amigos, esas personas con las que no compartes apellido, no llevan tu sangre y sin embargo te devuelven el pulso,
Te cuento que el inconsciente no elige amistades sino simbolos y repara lo que la sangre no pudo a traves de quienes llegan cuando más lo necesitas.
Una amiga con alma de abuela, un amigo con la risa de tu hermano, una ternura que te cuida como mamá nunca supo, un remiendo que encaja justo en el vacío que alguien te dejo, y tú sin saber te sientes en casa cuando te abraza.
No todos los amigos son de siempre, hay quienes aparecen y no se quedan, otros se quedan una estación para acompañarte justo el tramo que no podías caminar sola y después se van, otros se vuelven raiz, no necesitan verte seguido, no te juzgan si desapareces, no te piden explicaciones, simplemente estan, como el faro aunque nadie mire.
Hay amistades que duelen. No porque hubo enojo,
sino porque dejaron de contar contigo, porque hace rato no preguntan cómo estás. A veces lo que más duele es el silencio. La foto donde no estás. El plan que armaron sin ti. Y esa vieja sensación de quedarte, otra vez sin hogar.
Si hoy te sientes sin tribu, si mirás tu agenda y te falta alguien,si el chat vacío activa heridas antiguas...Respirá hondo. No es que te quedaste sin amigos. Estás en la estación, con la maleta llena de historias, a punto de subirte a otro tren.
No estás sola.Estás cambiando de escenario.
Y delante tuyo se abre un mapa inmenso de nuevas almas que están buscando refugio.Y tu también vas a ser abrigo para alguien. Familia no es solo quien te dio la vida.Familia es quien te la recuerda cuando se te olvida quién eres.
Porque el verbo favorito de la amistad no es amar.
Es compartir.
Compartir fragilidades y fortalezas, compartir la lluvia aunque arruine el plan.El vestido si no tienes qué ponerte. El asado si hay, y el abrazo si no hay nada más.
Así que no te quedes solo con la lectura de este post, compartelo con quien estuvo. Con quien falta. Con quien sabés que, cuando llegue,
vas a decirle:"Ya te estaba esperando."
A ti, que llegaste sin apellido y te volviste casa.
A ti, que fuiste abrigo, espejo, remiendo.
A ti, que me salvaste sin darte cuenta.
A tí amigo de todas mis vidas.Gracias por elegirme una y otra vez, aunque no recordemos desde cuándo.