Esther Ocaña Psicología Madrid

Esther Ocaña Psicología Madrid Psicología Online
Psicología Adultos y niños
Psicopedagogía Puedes dejar tus reseñas en :

https://g.page/r/CTXZYakM0eDrEBM/review

¿Te ha pasado alguna vez que, después de una ruptura, empezaste a hablar con alguien nuevo casi de inmediato? No porque ...
07/08/2025

¿Te ha pasado alguna vez que, después de una ruptura, empezaste a hablar con alguien nuevo casi de inmediato? No porque sintieras verdadera conexión, sino porque la idea de estar sola te resultaba insoportable. No porque te apeteciera conocer a otra persona, sino porque necesitabas llenar ese silencio incómodo.
El silencio donde empiezan a aparecer la tristeza, la angustia, los pensamientos que no quieres mirar. Quizás has sentido que estar con alguien es un alivio momentáneo. Que recibir atención, aunque sea superficial, te calma durante unas horas. Pero luego vuelve el mismo vacío. Y para no sentirlo, vuelves a escribir, a quedar, a entretenerte con otra presencia. Y sin darte cuenta, estás atrapada en un ciclo: “no puedo parar de estar con alguien, porque si me detengo, me duele.” A veces no buscamos amor.
Buscamos anestesia. Y confundimos deseo con necesidad emocional. Queremos que alguien nos distraiga, cuando en realidad lo que necesitamos es aprender a estar con nosotras mismas. Aprender a quedarte contigo cuando todo se ha caído… a sostener lo que sientes sin correr a taparlo…
Es una forma profunda de sanación.
No se trata de evitar el contacto o de cerrarte al mundo. Se trata de que el próximo encuentro no nazca de una carencia, sino de una elección consciente. Cuando aprendes a quedarte contigo, ya no aceptas migajas solo para no estar sola. Y ese es el principio de una libertad nueva.

www.estherocanarodriguez.es

💕
❤️✨

Muchas veces pensamos que poner límites va a alejarnos de las personas que queremos. Sentimos culpa, miedo al rechazo, o...
05/08/2025

Muchas veces pensamos que poner límites va a alejarnos de las personas que queremos. Sentimos culpa, miedo al rechazo, o a parecer egoístas. Pero… ¿y si te dijera que los límites no destruyen el vínculo, sino que lo ordenan y lo cuidan?
Cuando no expresamos lo que necesitamos o lo que nos hace daño, empezamos a tensar la relación sin darnos cuenta. Aguantamos, cedemos, y poco a poco dejamos de sentirnos cómodos. Esto no es generosidad, es desgaste.
Poner límites es una forma de decir: “Quiero seguir aquí, pero de forma que también me respete a mí.”
Piénsalo así: tu pareja te escribe constantemente mientras trabajas. Al principio lo ves como una muestra de cariño, pero con el tiempo te distrae, te estresa, y te cuesta concentrarte.
Si no dices nada, puedes acabar irritado o distante.
Pero si dices: “Durante el trabajo prefiero estar centrado. Luego hablamos con calma, ¿te parece?”, estás organizando el vínculo. Estás marcando un espacio sin rechazar a la persona. Estás enseñando cómo relacionarte contigo de forma más saludable.
Poner límites no es cerrar la puerta. Es ajustar la distancia para que el vínculo respire sin asfixiar.
Porque cuando te cuidas dentro de una relación, también estás cuidando la relación.
Los límites no son una barrera; son un mapa para encontrarse sin perderse.

¿Te ha pasado que miras tu vida y piensas: “No estoy haciendo nada con mi vida”?Te comparas con otros, ves sus logros, s...
04/07/2025

¿Te ha pasado que miras tu vida y piensas: “No estoy haciendo nada con mi vida”?

Te comparas con otros, ves sus logros, sus viajes, sus cambios, y tú… sigues ahí. Mismo trabajo, misma rutina, mismos miedos. A veces, confundimos calma con fracaso. Pensamos que si no hay grandes movimientos, no hay crecimiento. Pero crecer no siempre se ve bonito en Instagram. Piensa en esto:

cuando una planta echa raíces, no ves nada fuera. No florece aún. Se dedica a sostenerse, a afirmarse, a prepararse para lo que vendrá.

Quizá ahora mismo estás en casa, tratando de dormir bien. Poniendo límites por primera vez. Decidiendo a quién quieres cerca. O simplemente aprendiendo a decirte: “Hoy me doy permiso de descansar sin sentir culpa.” Eso también es crecer. Eso también es trabajar en ti, aunque no se vea. No te castigues por no correr cuando tu cuerpo y tu mente te piden pausa. Esa quietud es tu raíz. Y cuando florezcas, no será porque lo hiciste rápido, sino porque lo hiciste fuerte.

www.estherocanarodriguez.es

💕
❤️✨

Te ocurre más veces de las que quisieras: alguien no te saluda, tarda en responder o te hace un comentario seco… y sin d...
26/06/2025

Te ocurre más veces de las que quisieras: alguien no te saluda, tarda en responder o te hace un comentario seco… y sin darte cuenta, se te revuelve algo por dentro. Piensas que fue borde, que te está evitando, o que no le importas.

Pero si te detienes un momento, si te escuchas con honestidad, notas que esa incomodidad no es solo por lo que hizo esa persona. Hay algo más profundo. Te das cuenta de que lo que te dolió no fue tanto la acción, sino el significado que tú le diste: “no valgo”, “no soy suficiente”, “me están rechazando”.

Y ahí lo comprendes: lo que te afecta tanto no siempre es lo que está pasando ahora, sino una vieja herida que se activa. Quizá viene de sentirte poco visto en tu infancia, de tener que esforzarte mucho por ser aceptado, o de haber aprendido que el amor siempre venía con condiciones.

Por eso duele. Porque no solo es el presente, es todo lo que ese gesto remueve del pasado.

Pero al verlo, al nombrarlo, empiezas a sanar. Ya no reaccionas con rabia o con silencio. Te das espacio para entenderte, y en lugar de pedir que el otro repare, empiezas a darte tú lo que tanto necesitaste.

💭 A veces, el verdadero trabajo emocional no es cambiar lo que el otro hace, sino descubrir por qué eso te toca tan hondo.

www.estherocanarodriguez.es

💕
❤️✨

El otro día alguien me dijo:“Me pongo nerviosa cuando estoy sola. Me invento excusas para salir, quedar, distraerme… No ...
20/06/2025

El otro día alguien me dijo:

“Me pongo nerviosa cuando estoy sola. Me invento excusas para salir, quedar, distraerme… No sé estar conmigo sin sentirme vacía.”

Y es algo que escucho más de lo que imaginamos.
¿Te ha pasado? Llegar a casa y encender la tele sin ganas, coger el móvil en automático, incluso sentirte incómoda en silencio… como si tu propia presencia no fuera suficiente.

Nos enseñaron a buscar afuera: validación, afecto, calma. Y así vamos, llenando agendas y vaciándonos por dentro.
Evitar la soledad se vuelve un hábito. Pero lo que realmente evitamos es el encuentro con nosotras mismas: con lo que sentimos, lo que no hemos dicho, lo que duele o asusta.

Y entonces, estar sola se vuelve incómodo… porque ya no sabes cómo habitar tu propia compañía.

Aprender a quedarte contigo no es aislarte ni renunciar a los demás.
Es hacerte un espacio seguro dentro, donde no necesites huir para sentirte bien.
Es poder estar contigo sin juicio, darte lo que necesitas sin exigencias, reconocer lo que sientes sin miedo.
Cuando aprendes a quedarte contigo, ya no te abandonas para que no lo hagan otros.

www.estherocanarodriguez.es

💕
❤️✨

Seguramente alguna vez te has sentido que si no das el 100 %, no vale. Como si cada error, cada descanso o cada cambio d...
13/06/2025

Seguramente alguna vez te has sentido que si no das el 100 %, no vale. Como si cada error, cada descanso o cada cambio de planes fuera una señal de debilidad. Has sentido culpa por parar, vergüenza por no cumplir tu rutina al detalle, miedo a decepcionar incluso cuando estás agotado.

Pero detrás de esa exigencia, hay una parte de ti que solo quiere sentirse valiosa, segura, suficiente. Esa parte no necesita más sacrificio, sino más comprensión. A veces la verdadera fuerza está en parar, en aflojar sin rendirse, en escucharte sin juicio. Porque nadie puede sostenerse siempre desde el deber. También necesitas espacios donde puedas simplemente ser.

Recuerda esto: no tienes que hacerlo todo perfecto para estar orgulloso de ti. Estás creciendo, incluso cuando no lo notas. Estás avanzando, incluso cuando tropiezas. Y eso también merece ser valorado.

www.estherocanarodriguez.es

💕
❤️✨

Seguramente alguna vez te has sentido perdido, como si el suelo se abriera bajo tus pies y nada tuviera sentido. Has mir...
09/06/2025

Seguramente alguna vez te has sentido perdido, como si el suelo se abriera bajo tus pies y nada tuviera sentido. Has mirado alrededor y no has sabido por dónde empezar. Te has preguntado: ¿Cómo salgo de esto? Y la verdad es que ni siquiera tenías fuerzas para buscar la respuesta.

En esos momentos, lo que más cuesta es confiar en ti mismo. Pero aún así, seguiste. Diste un paso, aunque fuera torpe. Hiciste una pequeña cosa, aunque doliera. Y sin darte cuenta, empezaste a moverte. No fue mágico, fue valiente. Porque reconstruirse no es volver a ser el de antes, es permitirte ser alguien nuevo con todo lo que has vivido.

Ese caos que parecía el final era, en realidad, una puerta. Una oportunidad de soltar, redirigir y volver a ti. No era el final. Era el principio disfrazado de caos.
Y ahora que lo sabes, recuerda: no subestimes nunca tu capacidad de renacer.

💕
❤️✨

Seguro que alguna vez te has sentido tan roto por dentro que ni siquiera sabías por dónde empezar. Has sonreído cuando n...
05/06/2025

Seguro que alguna vez te has sentido tan roto por dentro que ni siquiera sabías por dónde empezar. Has sonreído cuando no tenías ganas, has seguido con tus rutinas mientras por dentro te ahogabas en pensamientos que nadie veía. Quizás te dijiste “no puedo más”, aunque por fuera parecías seguir funcionando.

Y sin darte cuenta, pasaron los días. Empezaste a hacer pequeñas cosas, aunque fuera con cansancio, con miedo o con dudas. No fue un gran cambio. Fue una suma de decisiones mínimas: levantarte, respirar, contestar un mensaje, prepararte algo de comer. Y poco a poco, empezaste a recuperar tu fuerza. No porque todo mejorara, sino porque tú cambiaste la forma de sostenerte.

Lo que un día te dolió tanto, hoy te recuerda lo lejos que has llegado. Tu herida no te define, pero sí te ha enseñado. Lo que un día te rompió, hoy puede ser el motor que te impulsa. Y eso también es crecer: cuando eliges volver a ti, incluso en los días más difíciles.

💕
❤️✨

Recuerdo una noche en la que me senté en el borde de la cama sin energía ni para llorar. Me sentía vacía, desconectada d...
28/05/2025

Recuerdo una noche en la que me senté en el borde de la cama sin energía ni para llorar. Me sentía vacía, desconectada de mí misma. No estaba pasando “nada grave”, pero todo dolía un poco. La acumulación de silencios, de no decir lo que necesitaba, de no hacer espacio para mí. Me miré las manos temblorosas y pensé: ¿En qué momento me dejé tan sola?.

Pasaron días en los que seguí funcionando en automático. Sonriendo cuando no me nacía, cumpliendo con todo excepto conmigo. Hasta que una tarde, después de una sesión de terapia, algo se quebró. No fue una gran revelación, fue apenas una frase: no tienes que esperar a estar bien para empezar a cuidarte. Ese día llegué a casa, me preparé una cena sencilla y encendí una vela solo para mí. Lloré mientras comía. Pero también sentí algo nuevo: presencia. Volver a mí. Poquito a poco, fui retomando cosas pequeñas: escribir, caminar sin música, apagar el móvil al atardecer. No como metas, sino como reconciliaciones.

Y aunque aún hay días en los que me siento lejos de lo que quiero ser, ya no me abandono. Porque entendí que no necesito tener fuerzas para empezar, solo necesito empezar con el poquito que tengo. Y que cada gesto de amor propio, por pequeño que parezca, es una declaración de vida.

No esperes el momento perfecto. No hace falta tenerlo todo claro, ni sentirte lista. Solo hace falta una chispa de amor por ti, incluso en medio del caos. Hoy sigue siendo un buen momento para empezar. Porque mientras sigas aquí, tú también mereces volver a ti.
www.estherocanapsicologia.es

💕
❤️✨

Tenías un plan. Un trabajo que te daba estabilidad, una relación que te hacía soñar con futuro, una rutina que, aunque a...
22/05/2025

Tenías un plan. Un trabajo que te daba estabilidad, una relación que te hacía soñar con futuro, una rutina que, aunque a veces cansaba, te daba estructura.
De pronto, todo empezó a desmoronarse. Primero fue el trabajo: una reestructuración, un despido que no viste venir. Luego, tu pareja, que ya no quería lo mismo. Después, un problema de salud que te obligó a parar justo cuando más querías avanzar.

Pasaste días en automático. Intentando gestionar papeleo, silencios, y ese ruido mental que no paraba. Te sentías perdida, sin dirección. Las noches se hacían eternas. Tus redes de apoyo estaban, pero tú no tenías fuerzas ni para sostener una conversación.
Te preguntaste mil veces: ¿por qué todo al mismo tiempo? ¿Cómo se rehace una vida cuando todo lo que la sostenía se rompe a la vez?

Y aunque al principio solo querías huir o desaparecer un rato del mundo, algo en ti eligió otra cosa. Empezaste desde lo más pequeño: salir a caminar, responder ese mensaje, pedir ayuda. Fuiste poco a poco haciendo espacio para entenderte, sentir, ordenar.
Te diste cuenta de que no eras débil por estar rota, sino valiente por no fingir que todo iba bien. Aprendiste a vivir con la incertidumbre, a confiar en tu capacidad de adaptarte. A reconstruir una vida que, aunque distinta, podía ser más tuya que nunca.

No eres lo que te sucede, eres lo que decides hacer con ello.
A veces la vida se rompe para que puedas rehacerte desde un lugar más honesto, más libre, más tú.

www.estherocanapsicologia.es

💕
❤️✨

¿Te acuerdas de aquella vez que te levantaste sin ganas, con el corazón hecho trizas, y aún así fuiste a trabajar como s...
07/05/2025

¿Te acuerdas de aquella vez que te levantaste sin ganas, con el corazón hecho trizas, y aún así fuiste a trabajar como si nada? O cuando lloraste en silencio en el baño para que nadie te viera, y luego volviste a tu rutina como si no estuvieras rota por dentro. Tal vez fue una discusión, una pérdida, un día que simplemente dolía… y aún así, lo atravesaste. Puede que lo hayas olvidado, pero tu cuerpo y tu alma no. Hay momentos que parecían insostenibles, días en los que pensaste que no podrías más. Y sin embargo, aquí estás. Quizás con cicatrices, sí, pero también con una fuerza que no siempre reconoces como tuya.

El amor propio no siempre se ve como autoestima alta.
A veces se parece más a levantarte aunque no tengas ganas, a seguir buscando ayuda, a tratarte con un poco más de compasión cuando cometes errores. Resiliencia no es no romperse, es reconstruirse con lo que se tiene, incluso con lo que duele.

No olvides esto: eres más fuerte de lo que crees.
Tu historia no se define por lo que te pasó, sino por lo que has hecho con eso. Cada paso, cada intento, cuenta. Has sobrevivido a todos tus peores días. No subestimes tu fuerza.

www.estherocanapsicologia.es

💕
❤️🧠

¿Te ha pasado alguna vez que sientes que es demasiado tarde para cambiar algo en tu vida? Quizás piensas que ya no tiene...
28/04/2025

¿Te ha pasado alguna vez que sientes que es demasiado tarde para cambiar algo en tu vida? Quizás piensas que ya no tiene sentido empezar ese proyecto, mejorar una relación, o cuidar de ti como quisieras. Esa sensación de haber “perdido el tren” puede ser tan intensa que te paraliza antes incluso de intentarlo.

Sin embargo, la mayoría de las veces esa percepción no es real. No es el momento “perfecto” lo que crea el cambio, sino tu decisión de actuar desde donde estás hoy. Hay personas que empiezan a estudiar una nueva carrera a los 40, que aprenden a poner límites sanos en relaciones después de años de costumbre, o que encuentran su verdadera pasión tras muchos fracasos. El tiempo que creías perdido, en realidad, te ha preparado para dar este paso con más conciencia.

La próxima vez que pienses “ya no estoy a tiempo”, recuerda: Estás a tiempo, siempre. No importa cuántas veces hayas dudado antes; lo que cuenta es tu próxima elección. Cada momento puede ser un nuevo comienzo si así lo decides. Y lo mejor es que nunca es tarde para apostar por ti.

www.estherocanapsicologia.es

💕
❤️🧠

Dirección

Madrid

Horario de Apertura

Lunes 10:00 - 21:00
Martes 10:00 - 21:00
Miércoles 10:00 - 21:00
Jueves 10:00 - 21:00
Viernes 10:00 - 20:30
Sábado 10:00 - 12:00

Teléfono

+34696186660

Notificaciones

Sé el primero en enterarse y déjanos enviarle un correo electrónico cuando Esther Ocaña Psicología Madrid publique noticias y promociones. Su dirección de correo electrónico no se utilizará para ningún otro fin, y puede darse de baja en cualquier momento.

Contacto El Consultorio

Enviar un mensaje a Esther Ocaña Psicología Madrid:

Compartir

Share on Facebook Share on Twitter Share on LinkedIn
Share on Pinterest Share on Reddit Share via Email
Share on WhatsApp Share on Instagram Share on Telegram

Categoría