EFECTOS DE K-LASER EN EL ORGANISMO
Recuperación tisular acelerada y desarrollo celular. El láser penetra en profundidad en los tejidos y aumenta la energía disponible para las células, por lo que la absorción de nutrientes y la eliminación de residuos se realiza con mayor rapidez. Como resultado, los tejidos se regeneran antes. Cicatrización más rápida de las heridas. La luz láser estimula la producción de colágeno, predominante en la cicatrización de heridas. Reducción de la formación de tejido fibroso. La laserterapia reduce la formación de tejido cicatrizal, causante del dolor crónico. Efecto anti-inflamatorio. La luz láser tiene un efecto anti-edémico ya que provoca vasodilatación pero también porque activa el sistema linfático. Como resultado se reduce la inflamación. Efecto analgésico. La terapia láser bloquea el dolor transmitido por las células nerviosas al cerebro. Además, al haber menos inflamación, disminuye el dolor. Aumento de la actividad vascular. La luz láser aumenta la formación de capilares en los tejidos dañados y el incremento temporal del diámetro de los vasos sanguíneos, acelerando el proceso curativo. Aumento de la función metabólica. La terapia láser origina una mayor producción de enzimas específicas y un mayor consumo de oxígeno y nutrientes por parte de las células sanguíneas. Función nerviosa mejorada. La luz láser acelera la reconexión de las células nerviosas en un tejido dañado. Inmunoregulación. Recuperación tisular acelerada y desarrollo celular. El objetivo de un láser terapéutico es llevar la energía a los tejidos profundos para bioestimularlos y acelerar los procesos de curación y regeneración. El K-Laser Cube es el láser terapéutico más avanzado, capaz de aplicar hasta 4 longitudes de onda diferentes de forma simultánea.
905nm: El oxígeno se libera de la corriente sanguínea a diferentes ritmos, y cuanto más rápido sucede, la célula podrá contar con más energía en su proceso de curación natural. Esta longitud de onda es absorbida en parte por la hemoglobina, el agua, la melanina y la citocroma. A mayor absorción de esta radiación, más cantidad de oxígeno estará disponible en las células.
660n: Al irradiar un área con una longitud de onda de 660nm, muy absorbida por la melaninade la piel, garantizará que una gran dosis de energía sea aplicada en superficie. Al poseer la luz un efecto antibacteriano y acelerar la actividad celular, la terapia láser permite obtener fantásticos resultaods en la curación de heridas y en la regeneración de los tejidos.
970nm: La sangre es el sistema de transporte primario que lleva los nutrientes necesarios y el oxígeno a las células. El agua de nuestro organismo capta muy bien esta longitud de onda, y cuando absorbe un fotón, toda la energía se convierte en calor. Estos tejidos profundos, puntos calienetes localizados, crean gradientes de temperatura a nivel celular que estimulan la microcirculación local que leva más energía en forma de oxígenos a las células.
800nm: La enzima terminal en la cadena respiratoria es la citocroma C oxidasa y determina el grado de eficiencia con que la célula convierte el oxígeno molecular en ATP. El pico de absorción de esta enzima se produce en los 800nm, alternando procesos de reducción y oxidación, produciendo en cada ciclo una molécula de ATP. La absorción de fotones acelera este proceso, y por consiguiente la producción de ATP.