
08/09/2025
Madre de 98 años se muda al asilo para cuidar a su hijo de 80.
Ada Keating vivía en Liverpool, Inglaterra, y toda su vida estuvo al lado de su hijo Tom. Cuando él tenía 80 años fue ingresado a una residencia porque necesitaba cuidados constantes. Pero Ada no quiso que pasara sus días solo, así que tomó una decisión sorprendente: a sus 98 años, también se mudó al mismo asilo.
Pidió una habitación junto a la de Tom y desde entonces repitió la misma rutina que tenía en casa: lo despertaba con un “buenos días” y en la noche pasaba a darle las buenas noches. Para los cuidadores era increíble ver cómo, pese a que ambos eran ancianos, Ada seguía tratándolo como si todavía fuera su niño.
El caso se conoció en 2017 y dio la vuelta al mundo por lo inusual de la escena: una madre casi centenaria acompañando a un hijo de 80 años dentro de un asilo. Hasta sus últimos días, Ada compartió con él ese mismo vínculo que nunca se rompió.