07/10/2025
Hay batallas que se ganan al no pelearlas más.
Con el tiempo aprendes que no todo merece una respuesta, una explicación ni una confrontación. Entiendes que el silencio, a veces, es el acto más sabio de amor propio y que retirarte a tiempo no siempre es rendirte, sino elegir la paz por encima del orgullo.
Hay guerras que solo desgastan, discusiones que no cambian nada y personas que solo entienden desde su propio ruido. Aprender a no pelear ya no es cobardía, es madurez. Es comprender que la energía que gastas defendiéndote o intentando demostrar tu valor, puedes invertirla en construir la vida que realmente deseas.
Soltar la necesidad de tener la razón, de ser entendido o de “ganar” una disputa, también es una forma de victoria.
Porque cuando eliges la calma por encima del caos, te das cuenta de que el verdadero triunfo es no perderte a ti mismo en ninguna batalla.
Psic. Julio César VP