04/12/2025
Un estudio publicado en la prestigiosa revista JAMA Pediatrics reveló algo que no podemos ver a simple vista, pero que ocurre dentro de la cabeza de nuestros niños.
El tiempo excesivo frente a pantallas está físicamente relacionado con un desarrollo más lento de la materia blanca.
Para entenderlo fácil, la materia blanca son las "autopistas" de información del cerebro. Son los cables esenciales que conectan las zonas encargadas del lenguaje, la capacidad de leer y la velocidad de pensamiento.
Las resonancias magnéticas mostraron una verdad incómoda, y es que los niños con mayor exposición a pantallas tenían una menor integridad en estas conexiones. Sus "cables" estaban menos organizados y menos desarrollados que los de los niños que jugaban fuera de las pantallas.
Esto explica por qué muchos niños pequeños hoy enfrentan mayores riesgos de como retrasos en el habla, dificultades para aprender a leer o problemas de comunicación.
El cerebro infantil no se construye solo, se construye con la experiencia y las pantallas, al parecer, no ofrecen los "ladrillos" necesarios para construir esa materia blanca de forma óptima.