29/06/2024
Nunca me gustó que le dijeran Dra Escopeta. ¿Por qué le decian así? - por qué le gritaba a todos los activistas. Nos lo mereciamos, neta. Su consultorio estaba frente a unos metros de Radio Universidad, y a lado estacionaban su ambulancia. Habló con sus estudiantes y así armó su guardia las 24 horas. Ella usaba su bata, física y políticamente, como un escudo antibalas, ni ella misma se creia que eso iba a funcionar, pero al final no había otra alternativa que buscarse un argumento, por débil que fuera, para no dar pasos atrás.
Flaquísima, con un algodón de cabellera, sus zapatos bajitos para correr rápido y una voz profunda que denunciaba sus largos años de fumadora.
Cuando ella llegaba era muy seguro el jalón de orejas pero también una idea brillante. A riesgo de su propia vida, fue la única doctora que atendió a los activistas heridos. ¿quién no la amaba?
No se si he vuelto a sentir esa emoción vibrante de las madrugadas en las que todo podía pasar. Eramos miles de cuerpos súper veloces, ágiles, contundentes en cada gesto. Eso fue hace 13 años en la .
Increíble Doctora Bertha, no has mu**to... Jamás podrán borrar tu ejemplo.
Texto: Rodrigo Cruz
