
05/03/2025
A veces, las personas se sumergen en la necesidad de saberlo todo, y en muchas ocasiones esto surge del deseo de conectar, de generar conversaciones y relaciones significativas. Sin embargo, cuando el conocimiento se convierte en una obsesión por saber más que los demás, deja de ser un puente hacia la conexión y se transforma en un mecanismo de validación. Lo que comienza como un interés genuino en aprender y compartir puede terminar en una lucha de egos, donde el saber deja de ser un medio para acercarse a otros y se vuelve un fin en sí mismo.
Pienso en esas conversaciones donde alguien parece más interesado en demostrar cuánto sabe que en realmente escuchar o conectar. ¿Te ha pasado?