16/09/2023
En el consultorio, su mirar es brisa,
una joven dentista, perla precisa.
Con manos diestras, alivia el pesar,
regala sonrisas, sabe amar.
En su ojos, el brillo de la esperanza,
cura con amor, sin darle calma a la bonanza.
En cada diente, un universo de luz,
restaurando alegría, virtud tras virtud.
El blanco delantal, su armadura fiel,
convierte el temor en risueño laurel.
Cautiva el alma de aquel que llega,
con dulzura y calidez, su esencia entrega.
No es solo el arte de arreglar dientes,
es el don de sanar corazones latientes.
En cada consulta, una historia se entreteje,
y ella, con paciencia, cada alma protege.
Bajo el dintel de su cálido abrazo,
el miedo se torna en tierna pasión,
y así, la joven dentista en su ocaso,
brinda al mundo su dulce bendición.
En su labor, un poema se escribe,
en cada caricia que al alma describe.
Una joven mujer, dentista y musa,
que en cada sonrisa, su amor difusa.
