
25/08/2025
En definitiva, todos los grandes desafíos. Todos tienen que ver con el n**o gordiano de los movimientos personales del corazón, música de toda vida. Hay movimientos de expansión y movimientos de retracción.
Con los movimientos de expansión experimentamos alegría, inclusión; nos abrazamos y abrazamos al otro y lo otro. Nos expandimos. Con los movimientos de retracción, en cambio, sentimos rechazo y exclusión del otro, de lo otro e, incluso, de uno mismo. Nos tensamos.
Rilke escribe: «Ten paciencia con todo lo que sigue sin resolverse en tu corazón».
Es maravilloso, porque nos propone una actitud paciente, confiada, se diría que incluso piadosa. Todos tenemos asuntos sin resolver: una separación pendiente, algo con la madre, algo con un hijo, algo respecto a nosotros mismos que nos aprieta, alguna culpa, un diagnóstico reciente, un duelo. Si nos escuchamos atentamente, salta de inmediato y de forma natural lo que debe ser abordado como siguiente paso en nuestro camino.
Ten paciencia contigo todo lo que sigue sin resolverse en tu corazón.
Si pudieras mantener nuestro corazón maravillado ante los diarios milagros de la vida, nuestro dolor no parecería menos prodigioso que vuestra alegría.
Mucho de nuestro dolor es elegido por nosotros mismos.
Por tanto, confiad en el médico interno y beber el remedio en silencio y tranquilidad, porque su mano, aunque dura y pesada, guiada está por la tierna mano del invisible.
A mí vida y a mi destino grandioso yo le digo sí así como es tal cual es gracias gracias gracias UCPME QMEP.