08/05/2025
Estimados pacientes,
Les invito a leer este comentario de nuestro ortopeda pediátrico.
El que muchas veces me consigue cita de hoy para mañana en el área oeste.
Recoge completamente el problema que tenemos con el plan First Medical.
Compartan por favor.
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A finales de 2021, tuve la oportunidad de completar mi entrenamiento en ortopedia pediátrica con la esperanza de servir a los puertorriqueños, especialmente a la población pediátrica. Conociendo la necesidad que hay en nuestro país nos hemos enfocado en ayudar en áreas de alta necesidad, estableciendo una práctica en el área oeste y ayudando a todos en la manera que sea posible. En mi práctica no le cerramos las puertas a ningún niño, sin importar la complejidad del caso y buscamos que nuestro servicio sea de excelencia.
El proyecto que Dios nos ha permitido desarrollar nunca lo pude haber imaginado y la oportunidad de servicio ha sido increíble. Sin duda, parte del enfoque que tenemos en nuestro corazón es atacar los problemas de años y buscar soluciones que nuestro sistema de salud enfrenta a diario. Lo que no se puede obviar, que me decepciona a diario, es que los planes médicos decidan hacer lo que le da la gana con los proveedores y practiquen su corrupción a diario sin importarle a nadie.
Es vergonzoso que en nuestro país se limite el acceso al cuidado médico porque aseguradoras que ya el gobierno o el asegurado principal aporta el dinero decide no pagar por el servicio que ya se brindó a sus asegurados en el tiempo acordado por el contrato (ejemplo: First Medical en nuestra clínica). Luego, sin pudor en la cara, te acumulan la deuda, con la expectativa que los llames para recordarles la deuda y su respuesta es : “Mañana te pagaremos la mitad de la deuda” o “pronto sale un cheque”. Quieren que el proveedor constantemente mendigue por su trabajo. Nadie fiscaliza esto y el impacto al paciente es atropellador. No es aceptable que vivamos en una sociedad que niños que tienen un plan médico no puedan acceder a un sub-especialista porque esa oficina se cansó de los impagos. Como puertorriqueño, médico y sub-especialista, me niego a que nuestra clínica simplemente no acepte el plan y que los pacientes “breguen”. Lo triste es que desde un punto de vista de negocio, a las aseguradoras les conviene esta estrategia porque muchas familias desisten de buscar ese servicio, representando un ahorro directo ya que no gastan dinero en ese paciente. Por tal razón, muchos pacientes se encuentran descompensados de su condición médica.
Mi compromiso con usted es más allá de la ortopedia y sueño que ese sea el sentimiento de la mayoría de todos ustedes, especialmente los niños que me observan. Por demasiado tiempo la clase médica y la comunidad se encuentra segregada en cuanto a buscar soluciones. Les exhorto que usted como padre y paciente, le pregunte a sus proveedores sobre el trato de su aseguradora con el proveedor. Si es común una queja, considere cambiar de aseguradora. Confíe, que la irresponsabilidad de ese plan, le puede costar tarde o temprano, porque uno nunca sabe cuándo necesite esa mano amiga. Los problemas del sistema son muchos, pero el acceso a los pocos proveedores no puede ser uno. Aquí podemos hacer una medicina de excelencia, pero nos toca luchar a todos juntos.
No podemos luchar por un cambio solo cuando nos afecta como individuos. Hoy hago un reclamo a mi gente, a esa que yo vine a servir y me considero parte, que trabajemos por el cambio que nuestro Puerto Rico necesita. Así como mi compromiso es servir a todos, tenemos que encargarnos de proteger y expandir el acceso médico a todos, especialmente aquellos que ya tienen planes médicos. Es tiempo de dejarle saber a esas instituciones que si no hacen su trabajo, nos vamos a unir para que desistan de sus actos de corrupción. Sin los pacientes ellos no existirían.
Estoy abierto al diálogo y colaborar con otros para corregir estos abusos que afectan a nuestra población más vulnerable, especialmente pacientes impedidos. Y si tengo que seguir luchando solo, confía que no me quito. Agradezco tu apoyo compartiendo este mensaje y sobre todo cuento con ustedes para un mejor Puerto Rico. ¡Se puede!