21/06/2024
El Arte de Volver a Ser Niños🎨🪁
Los niños deben explorar el mundo, ensuciarse, y cometer errores. Estas experiencias son fundamentales para aprender sobre el entorno en el que vivimos y desarrollar habilidades vitales.
Cuando somos pequeños, la curiosidad nos impulsa a descubrir cosas nuevas, a probar lo desconocido y a enfrentarnos a desafíos. Esta exploración activa nos ayuda a entender cómo funciona el mundo, a desarrollar nuestra creatividad y a fortalecer nuestras habilidades para resolver problemas.
Ensuciarnos y cometer errores son partes esenciales de este proceso de aprendizaje, ya que nos enseñan a manejar la incertidumbre y a adaptarnos a diferentes situaciones.
Sin embargo, en muchas ocasiones, no se nos permite experimentar libremente durante la infancia. Ya sea por miedo, sobreprotección o normas demasiado estrictas, estas limitaciones pueden tener un impacto significativo en nuestro desarrollo.
Cuando no se nos da la oportunidad de explorar y aprender de nuestros propios errores, podemos crecer con una aversión al riesgo y una falta de confianza en nuestras capacidades.
Este control y restricción durante los años formativos pueden resultar en comportamientos problemáticos en la adultez.
Los adultos que no tuvieron la oportunidad de experimentar libremente pueden desarrollar miedos irracionales, inseguridades y una resistencia al cambio.
La falta de experiencias tempranas de ensayo y error puede llevar a una baja tolerancia a la frustración y a una dependencia excesiva de la aprobación externa.
A veces, es necesario regresar a sanar nuestro pasado, sanar a estos niños quienes día con día intentan llamar nuestra atención.
Que no nos dé miedo sacarlos a vivir de vez en cuando. Permitámonos esos momentos de curiosidad, de aprendizaje, de ensuciarnos y hacer cosas con las manos.
Te invito a intentarlo.