08/06/2025
Disfruto mucho dar clases privadas, es un espacio muy enriquecedor porque me hace agudizar mi percepción de la energía de la persona que tengo delante, para luego poder darle lo que su cuerpo y su mente necesita.
Ahí es donde entra eso que para mí es el arte de enseñar y guiar una práctica: tener la sensibilidad y la sutileza para llevar al alumno por un camino que quizás no es el que más le gusta, pero en el que pueda confiar en mí y, al final de la clase, darse cuenta de que eso que le propuse era justo lo que necesitaba.
No siempre sale así, pero para mí, ese es el camino al que siempre apunto.
Esto es una oda a mis alumnos y alumnas de clases privadas, que son gente excepcional de los que aprendo cada día, y sacan lo mejor de mí cada día.
❤️
