21/01/2012
La clave para entender el año del Dragón es esta idea de la armonía con el entorno y sus circunstancias, en otras palabras, durante este año hay que intentar ver claras cuales son las circunstancias que nos rodean (la realidad), y actuar en consecuencia.
Esto que así escrito parece una tontería, es bastante difícil, porque esa realidad tiene demasiadas cosas desagradables en los tiempos que vivimos, y eso hace que el actuar de una forma coherente y armoniosa con lo que nos rodea pueda implicar conflictos, disgustos, situaciones demasiado interesantes, cambios vertiginosos... y en la práctica la mayoría de personas prefiere mirar para otro lado y hacer "lo que hacen los demás".
Lo que ocurre con el Dragón es que tiene una energía enorme, y literalmente es capaz de arrasar fulminantemente con cualquier cosa que se le ponga por delante, se lo puede uno imaginar como una especie de tsunami, que arrasa todo lo que se encuentra a su paso, lo que ocurre es que no tiene porque ser destructivo, de hecho la mayoría de las veces no lo es, digamos que toda esa energía tiene tendencia a canalizarse de una forma constructiva, pero siempre en armonía con el entorno.
En otras palabras, que durante este año lo que no esté en armonía con su entorno se vendrá abajo, y lo que si esté crecerá y se desarrollará imparablemente; así pues habrá grandes ascensos y grandes caídas; pocas cosas estarán igual que al comienzo cuando termine el año chino.
Aunque esto pueda sonar un tanto apocalíptico en el fondo no deja de ser una ley eterna de la Naturaleza, que de una forma u otra acaba poniendo a cada cosa en el sitio que le corresponde, es como cuando en un ecosistema hay una plaga, digamos de lagartijas, y llega un punto en que agotan por si mismas los recursos que les sostienen, de tal manera que se debilitan y pronto aparecen otros animales que ocupan su lugar, ya sea alimentándose de ellos o beneficiándose del espacio que dejaron. Unos van para arriba, y otros, para abajo.
En lo que se refiere a la vida cotidiana de cada uno hay que intentar ser valientes y no tener miedo, sobre todo a los grandes cambios o las grandes iniciativas, el dragón saldrá a nuestro encuentro de una forma u otra, y será fácil de reconocer porque ya se sabe que le gusta hacerse notar... serán oportunidades y caminos claros los que se nos mostrarán, y a la vez plagados de incertidumbre, peligros y riesgos más grandes de lo deseable.
Hay que tener prudencia, pero no hay que tener miedo, una característica del Dragón es que tiene una gran dosis de buena suerte, y transmite esa buena suerte a todos los signos del Horóscopo Chino que siguen su camino... por eso tradicionalmente se ha usado como símbolo protector, poniendo hermosos dragones por ejemplo en las esquinas de los tejados para proteger la casa contra el agua y otras desgracias
