23/05/2022
EXCITACIÓN FEMENINA
Cuando la mujer se excita sexualmente,
el útero empieza a latir como un corazón,
un poco más lentamente.
Impulsado por la emoción erótica,
palpita como una ameba que se contrae
y que se expande,
como lo hace el cuerpo de una rana al respirar. Justamente, los Taironas (indígenas de Colombia) representan el útero como una rana.
Durante 5 milenios fue el útero
y no el corazón el símbolo del amor y de la vida.
Y sabemos por la Medicina Tradicional China, que existe una conexión directa entre el corazón y esta entraña curiosa.
El útero, además,
tiene conexiones nerviosas con el neocórtex
y con el sistema nervioso voluntario.
Por tanto, cuando la mujer recupera la unidad psicosomática útero-consciencia puede, consciente o semi-inconscientemente, acompañar ese movimiento ampliando la ola de placer,
de tal manera que puede vivenciar su sexualidad de forma expandida,
sana y continuada.
Lo que sucede habitualmente,
es que cuando la niña llega a la adolescencia (debido a la represión de su naturaleza, miliar y social),
tiene el útero tan rígido y contraído,
que la mínima apertura del cérvix uterino para dejar salir la menstruación,
produce dolor.
Pero el útero es recuperable,
y crecemos de jóvenes con dismenorreas,
que al adquirir conciencia de su útero, visualizándolo,
sintiéndolo
y relajándolo,
han normalizado sus ciclos.
Tomar conciencia del útero,
visualizarlo,
sentirlo
y relajarlo
vive en plenitud.
Para recuperar la sensibilidad uterina
la primera cosa que hay que hacer
es explicar a nuestras hijas desde pequeñas que tienen un útero,
para qué sirve y cómo funciona.
Explicarles que cuando se llenan de emoción y de amor,
su útero palpita de placer.
Por: Casilda Rodrigañez ~ "El Asalto al Hades"