11/07/2022
Parte del proceso terapéutico lo entiendo como un camino para el propio auto-desarrollo y auto-conocimiento que nos lleve al auto-sostén y a la auto-guía, valga la redundancia. Suelo hablar de "entrenamiento de vida", en el sentido de que se durante el proceso se practica una mirada y se experimenta un resultado por incorporar estas formas nuevas de percepción y de conocimiento de sí mismo como de la realidad que rodea. En la medida que encuentro en la realidad externa información sobre mi realidad interna, puedo comprender que todo es expresión de algo por identificar, conocer, aprender y diferenciar para esclarecer eso de adentro y viceversa. Pero el punto a compartir con este título es ver la posibilidad que trae el proceso terapéutico cuando lo veo como una ejercitación de una forma nueva de vivir para la vida misma en lo sucesivo a venir. Es cierto que se puede consultar por un conflicto específico, pero finalmente si logras adquirir una forma nueva de observar, de sentir y de pensar, estarías adquiriendo una nueva forma de vivir, y así creo que te puedes llevar más de lo que vienes a buscar. Se trata de una mirada sistémica y circular, tanto como dinámica e intuitiva. El presente como espejo se refiere a ver a "nuestro entorno como la suma de espejos de distintas profundidades; es el espejo de los propios conflictos, como los de nuestros antecesores y ancestros, ya sea en aquello que no consiguieron resolver, como en aquello que sí pudieron y realizaron el salto de crecimiento y aprendizaje que nos permite estar donde estamos. Podemos dejarnos arrastrar o ser consciente y elegir un poco, creando nuevos espejos llenos de nuevas posibilidades."
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