28/12/2020
Buen día a tod@s!!!
Hoy les dejo una placa que publiqué hace un par de días en las historias de mi perfil personal, en el que me muestro cada día desde un ángulo más divertido, liviano y, a veces, hasta ridículo pero al que de vez en cuando, subo algo que realmente me define en cuánto a lo emocional, como pasa con este pensamiento y la canción con la que lo musicalicé.
Por qué soy tan diferente en mi perfil personal?
En realidad, no creo ser muy diferente y sé que mi impronta es notoria en ambos perfiles pero creo que aún me "cuido" y eso tiene que tiene que ver con las vidrieras de las que les vengo hablando, con ese exponerse tal cuál somos sobre el que alguna vez escribí en este perfil. Cuándo toma sentido todo ésto? Al menos para mí, sucede cuándo nos asumimos alegres, espirituales, amorosos, divertidos, sabios, responsables, empáticos, solidarios y cuando nos aceptamos tal cuál somos pero al mismo tiempo, podemos hacernos cargo de que somos enojones, irreverentes, algo ridículos e inmaduros y un tanto egoístas. Cuando nos damos cuenta de que rechazamos algunos de nuestros pensamientos o sentires. Cuando aceptamos que podemos juzgar a otr@s y luego trabajamos nuestro interior para dejar de hacerlo y nos damos cuenta de lo cuesta. Uffff, cómo cuesta, no? También cuando sabemos que está bien que dudemos de lo que pensamos, sentimos, expresamos y somos porque creo que ahí es cuando nos movilizamos y podemos encontrar nuestro centro y volver a nuestro eje. Creo que en la certeza de nuestra dualidad, está nuestra real posibilidad de cambio. Creo que reconocer nuestras luces y nuestras sombras y aceptarlas con el mismo amor, nos hará grandes. Saber que somos música pero que también somos caos y que, de vez en cuando, somos la música para el caos, nos acerca al autoconocimiento, la autoaceptación y a la libertad interior.
Transitemos el tiempo al ritmo de nuestros corazones y disfrutemos a cada paso del aprendizaje adquirido.
Sí, aunque muchas veces duela.
Les deseo un feliz dia!!!
L@s abrazo,
Luciana.