09/10/2025
La boca es la puerta de entrada al cuerpo. Es un espejo de lo que ocurre adentro: del modo en que respiramos, digerimos, masticamos y nos comunicamos.
Desde la Terapia Neural, aprendemos a mirarla como un territorio profundamente conectado con el sistema nervioso, imunológico, digestivo y respiratorio.
En la boca pueden manifestarse desequilibrios que hablan del estado general del organismo: amígdalas inflamadas, presencia de metales, saburra, candidiasis, maloclusión, bruxismo, alteraciones posturales o respiratorias. Cada signo hallado aporta pistas y nada está aislado.
Incluso la pérdida del hábito de masticar, propia de una alimentación blanda y ultraprocesada, sostenida por años, cambia la arquitectura bucal, la tonicidad muscular, la necesidad de ortodoncia. Es una cuestión alimentaria, y también estrutural, adaptativa.
No todo procedimiento odontológico es inocuo: implantes, endodoncias o extracciones realizadas en un estado inflamatorio o imunológicamente vulnerable pueden tener consecuencias.
El momento clínico en que se realiza una intervención también importa y considerar ese tiempo forma parte del cuidado integral de la persona.
Tener esto en cuenta permite articular con otras especialidades -como la odontología neurofocal y biológica- en favor de un abordaje más respetuoso, preciso y humano.
Dra. Maia Ferreira Benegas
Medicina Biológica & Terapia Neural