
12/06/2025
Masajes y Lipedema: Lo que Necesitas Saber
Muchas personas buscan alivio a través de masajes, pero es crucial entender qué tipo de masaje es beneficioso y cuál puede empeorar los síntomas.
¿Qué masajes SÍ pueden ayudar?
El drenaje linfático manual (DLM) es el tipo de masaje más recomendado para el lipedema. Realizado por un terapeuta capacitado, ayuda a mover el líquido linfático estancado, reducir la hinchazón y aliviar el dolor. Otros masajes suaves, como los que buscan relajar los tejidos sin aplicar mucha presión, también pueden ser útiles.
¿Qué masajes NO se recomiendan y por qué?
Aquí viene lo importante: ciertos tipos de masajes pueden ser contraproducentes para las personas con lipedema. Es fundamental evitar:
Masajes descontracturantes profundos o muy enérgicos: Aunque son excelentes para la tensión muscular, la presión intensa puede dañar los frágiles vasos linfáticos y sanguíneos en las zonas afectadas por el lipedema, aumentando la inflamación, el dolor y la aparición de hematomas.
Masajes reductores o anticelulíticos: Estos masajes suelen ser muy vigorosos y están diseñados para romper depósitos de grasa. En el lipedema, la grasa es diferente y estos masajes no solo son ineficaces, sino que pueden empeorar la sintomatología y el dolor.
Aparatología que genera mucha presión o calor intenso: Algunas terapias estéticas con máquinas que aplican presión o calor pueden ser perjudiciales para los tejidos con lipedema.
¿Por qué es tan importante elegir bien?
La piel y los tejidos con lipedema son más sensibles y propensos a la inflamación y los hematomas. Un masaje inadecuado puede agravar la hinchazón, aumentar el dolor y dañar aún más el sistema linfático.
Siempre consulta con un profesional formado en Lipedema
Antes de iniciar cualquier tipo de masaje, es fundamental que consultes con tu médico o un fisioterapeuta especializado en lipedema.
Ellos podrán evaluar tu caso particular y recomendarte el tratamiento más adecuado para aliviar tus síntomas sin causar daños.