23/11/2017
Grafologia y Tatuajes
¿Por qué nos tatuamos?
Para empezar con el análisis y la interpretación de un tatuaje, es necesario tener claro que existen una serie de motivaciones para hacérselo:
como expresión de lo que se desea o se cree ser
como deseo de alterar el tiempo, es decir, permanecer en un estado actual, representar un estado pasado o bien lo que se desea en el futuro
como elemento que me identifica o define como forma de rendir homenaje a algo o a alguien significativo para nosotros
como una representación estética (según el punto de vista del que se lo hace .
¿Imagen o palabras?
Como sucede en tantas otras cosas, el tatuaje también se ve influido por la moda del momento y el valor social que se le concede. En los últimos tiempos lo está el tatuaje de frases. Aún tenemos en la retina el último que se hizo Rihanna bajo la clavícula "Nunca es un fracaso, siempre una lección".
Una frase tatuada podría considerarse bien como un lema o eslogan o como una frase identitaria familiar o una descripción aproximada de quiénes somos y cómo nos sentimos. Sea como sea esta frase nos define de algún modo.
Aspectos a tener en cuenta para interpretar los tatuajes
A nivel general (sean imágenes o frases), deberemos fijarnos en 5 variables:
Localización: si es visible la persona gustará de mostrarse y exhibirse más que si se encuentra en una zona no visible o más disimulada. Incluso hay quién interpreta el lugar concreto del cuerpo, pero considero que este aspecto es muy personal.
Tamaño: si es de grandes proporciones la persona prefiere ser el centro de atención y hablar sobre sí mismo sin tapujos, mientras que si es pequeño buscará complicidad en entornos más íntimos.
Forma: aquí entra en juego la simbología de cada forma. Así por ejemplo, la mariposa representa la necesidad de cambio y de conseguir mayor libertad.
Cantidad: a mayor cantidad mayor necesidad de dejar marcada nuestra identidad, de anclarnos en un momento o estado deseado y llevarlo siempre con nosotros.
Color: de nuevo debemos recurrir a la simbología del color. Por ejemplo, el azul está ligado a la tranquilidad y la calma. El negro es el más habitual por su contraste.
En cuanto a los tatuajes de frases, la clave de interpretación será el análisis de la fuente tipográfica. Existen 4 tipografías básicas de las que parten todas las existentes, cada uno con su significado propio:
Romana: tradición, formalidad
Egípcia: fuerza y contundencia
Sin Serif: dinamismo y potencia
Fantasía: transgresión, espontaneidad, exclusividad
Según dice un tatuador, los clientes suelen pedir letras tipo caligráfica (dentro de la tipografía Fantasía) o diseñadas a medida. El motivo es que las tipografías Fantasía ofrecen mucha versatilidad, permiten darle un carácter más personal y distintivo al tatuaje.
El auge de las frases tatuadas puede venir precisamente de la gran cantidad de variantes y posibilidades que se pueden conseguir con las tipografías, adaptables al gusto de cada persona, casi haciéndolas únicas e irrepetibles.