24/09/2025
Respirar y exhalar por la nariz es lo más recomendable y natural para el cuerpo por varias razones fisiológicas y energéticas:
1. Filtrado del aire
La nariz tiene vellos y mucosa que actúan como un filtro, atrapando polvo, bacterias, virus y partículas dañinas antes de que lleguen a los pulmones.
2. Humidificación y calentamiento
El aire que entra por la nariz se humedece y se calienta, evitando que los bronquios y pulmones se resequen o irriten.
3. Óxido nítrico (NO)
Al respirar por la nariz, se produce óxido nítrico en los senos paranasales. Esta molécula dilata los vasos sanguíneos, mejora la oxigenación y fortalece el sistema inmune.
4. Regulación del ritmo respiratorio
La nariz ofrece más resistencia al paso del aire que la boca, lo que hace la respiración más lenta y profunda, favoreciendo la oxigenación y la activación del sistema nervioso parasimpático (relajación).
5. Activación diafragmática
Al respirar por la nariz se estimula mejor la respiración abdominal y diafragmática, lo que favorece la postura, la digestión y la relajación.
6. Equilibrio energético (visión del yoga y pranayama)
Las fosas nasales están conectadas con los nadis (canales energéticos):
Fosa derecha → Pingala nadi (energía solar, activa).
Fosa izquierda → Ida nadi (energía lunar, calmante).
Al respirar por la nariz, equilibramos estos flujos sutiles y armonizamos cuerpo y mente.
👉 En resumen: inhalar y exhalar por la nariz protege, oxigena mejor, relaja y equilibra el cuerpo, mientras que hacerlo por la boca se asocia a respiración superficial, sequedad, fatiga y mayor estrés.