
26/03/2020
UN DIA A LA VEZ...
El camino que hoy nos ha tocado recorrer es largo, poco conocido, peligroso, no elegido y suele presentar varios obstáculos. Pero, si tratamos de imaginarlo en toda su dimensión de una sola mirada, sobre todo si usamos lentes para visión catastrófica, quizás esa imagen nos frene en lugar de estimularnos a cumplir con las normas indicadas por autoridades sanitarias competentes hoy más que nunca, o a la inversa cuando minimizamos la situación y no las acatamos.
¿Cuantas veces nos propusimos o nos propusieron cambios drásticos en la vida, proyectos enormes y ambiciosos que, más que ayudarnos nos apabullaron? Este sistema tan exigente y desmedido suele fallar.
En este momento a raíz del Covid 19 y la cuarentena establecida, procuremos ser un poco más modestos, menos soberbios, escuchemos más, seamos más responsables, planifiquemos, asentemos y actuemos, de una manera constructiva cada día. No pensemos que esta situación no pasará pronto, pero convengamos que llevará tiempo….
Hagamos la prueba de pensar simplemente, que durante 24 horas no haremos aquello que tanto nos gusta y atrae, que no podremos cumplir con nuestras tareas cotidianas, encontrarnos con nuestros afectos, amigos, compañeros, concurrir a nuestros espacios de esparcimiento, ver los deportes y espectáculos favoritos y esto nos hará sentir calmados y capaz de ejercer ese control que tanto nos cuesta, sobre los impulsos.
Pensemos un poco en la realidad actual. Es importante como punto de partida que aceptemos, en primer lugar, que el Covid 19 es una enfermedad que se propaga muy fácilmente, que nos supera y ha traído y generará muchas y peligrosas complicaciones. Debemos aceptar, además, que es una situación que puede alterar nuestro estado de ánimo y nuestra manera de actuar frente a tantas restricciones y limitaciones y que muchos pueden pensar y creer que “a mí no me va a pasar”, esas pueden ser las personas más vulnerables y sin querer serlo, los continuadores y propagadores de una larguísima cadena de contagios.
Finalmente, admitamos que frente a todo lo expuesto y lo que nos dicen necesitamos ayudarnos, colaborar, ser responsables y conscientes porque esta enfermedad y sus complicaciones, pueden ser controladas si estamos dispuestos/a al cuidado personal, la higiene, el trabajo y la tolerancia suficiente, Día a Día.!! Un profesional, un grupo, un amigo o su familia a través de los medios que por suerte hoy tenemos a nuestro alcance (Internet) pueden ayudarnos pero, fundamentalmente, somos nosotros (cada uno) quien debe ayudarse cumpliendo su parte, en forma continua y sin desmayos.
Y aquí es donde se torna importante la manera de planear las cosas, poco a poco, sin exigencias desmedidas, sin dejarse vencer por la ansiedad o “el furor curandi” el deseo de romper los límites (viveza criolla) con cualquier excusa, de UN DÍA A LA VEZ!!!
Lograr que la Epidemia se logre controlar o que al menos cause los menores daños posibles no depende de la casualidad, sino que es el resultado de una manera de pensar y de actuar que debemos llevar a la práctica diariamente.
¿ALGUNAS SUGERENCIAS PARA LAS PROXIMAS 24 HORAS?
Los proyectos demasiado ambiciosos suelen fracasar. Propóngase un esfuerzo para estas 24 horas, nada más.
No piensen que pasaremos toda la vida “en cuarentena” Pensemos, en cambio, que hoy elegiremos bien y haremos una buena planificación del día y la cumpliremos sin irritarnos ni rebelarnos.
Un plan adecuado requiere cumplirse por pasos. Sin apuro, pero sin interrupciones, pero bien planificado, y si no lo logramos tenemos por delante otras 24 horas para demostrarnos que somos capaces de cumplirlo.
Acción es Acción y no conversación, todos damos consejos, pero el que más llega, viene de la mano de la acción, el ejemplo!!
Hay dos días en la semana de los cuales no tendríamos que ocuparnos, el ayer, pues ya ha pasado y el mañana, porque no ha llegado aún.
¡¡Pongamos nuestra energía y decisión en el hoy!!
¡¡Vivamos un día a la vez!!