06/12/2025
La compasión
Cuando miramos las demás existencias, mirémoslas como la propia existencia. Cuando nos miramos a nosotros mismos, hagámoslo como a cualquier otra existencia.
Todas las existencias son idénticas y están en unidad. No tener prejuicios, crear grupos, amar o no amara. Si alguien quiere encontrar la Vía, si alguien quiere conocer el Zen, si alguien busca la Vía, tienes que enseñársela inmediatamente. [...]
La perseverancia
Cuando eres feliz, no eres demasiado feliz.
Cuando eres desgraciado, no eres demasiado desgraciado.
El espíritu interior no se quebranta por el placer ni por el disgusto. [...]
No le influye lo material, las palabras, el rostro, el poder de la gente ni cualquier otra cosa. No quedar influenciado, no responder a circunstancias exteriores. Mantener siempre la condición normal del espíritu.
Si vives solo en una habitación oscura, no debes soñar con el s**o ni dormir demasiado, sino seguir haciendo zazen, haga frío o calor.
No debes dejar que nada te perturbe. Ningún viento debe agitarte. Ni siquiera si todo tipo de ilusiones aparecen en tu espíritu, debes hundirte, sino mirar la vida cósmica con tus propios ojos, con tu propio espíritu.
Practica y comprende esto.
Si posees jinin, entonces puedes practicar la verdadera vida cósmica y lograr el satori para ayudar a los demás.
Si tu poder de perseverancia no es lo bastante fuerte o es inexistente cuando eres compasivo hacia los demás, es como si pusieras hielo en agua caliente. El hielo, la perseverancia, se funde y desaparece.
Si tu poder de perseverancia es fuerte, cuando eres compasivo con los demás, puedes ayudar realmente a todos, en la verdadera libertad. Sigues la vida cósmica y puedes dar a los demás la verdadera felicidad. Eres como el árbol que, en primavera, da brotes, en verano, flores y en otoño, frutos. El invierno es la estación del descanso de la perseverancia que posibilita la germinación de la primavera, las flores del verano y los frutos del otoño. [...]”
Es un error querer practicar la perseverancia sin compasión. De ahí la importancia de zazen. Zazen no es ascetismo. Zazen no está hecho para salvarte tú mismo, zazen te aporta firmeza interior al mismo tiempo que compasión.
Comentario del maestro Taisen Deshimaru a “El canto del inmediato satori”, de Yoka Daishi. Editorial Kairós.