23/03/2021
💜 Hoy vamos a charlar sobre 𝗟𝗮 𝗻𝗲𝗰𝗲𝘀𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗱𝗲 𝗮𝗽𝗿𝗼𝗯𝗮𝗰𝗶ó𝗻:
En una ocasión Les Brown afirmó que «la opinión de los demás sobre ti, no tiene porque convertirse en tu realidad«. Sin embargo, se trata de una de esas frases grandilocuentes que son más fáciles de memorizar que de llevar a la práctica. De hecho, todos, en alguna que otra medida, sentimos la necesidad de aprobación.
En realidad, la necesidad de aprobación no es algo negativo pero lo importante es que no crezca de manera desproporcionada. El problema comienza cuando nos esforzamos en demasía con el único objetivo de lograr la aprobación de los demás. Un problema que a veces tenemos sin percatarnos de que existe, lo cual, obviamente, nos impide avanzar.
Antes de analizar la necesidad patológica de aprobación es importante comprender de dónde proviene esta emocional.
👉 Existen algunas actitudes que se convierten en señales premonitorias:
– Mostrarse demasiado amables cuando estamos en desacuerdo con las opiniones de los demás. No estoy diciendo que cuando estemos en desacuerdo debemos adoptar comportamientos violentos y hacer que nuestra opinión prevalezca a toda costa pero es normal que pongamos un poco de pasión al defender nuestro punto de vista.
– No decir no. Si no sabes decir no y supeditas tus propias necesidades a las de los demás todo el tiempo, es muy probable que en la base se encuentre la necesidad de aprobación.
– Cambiar de opinión para ser amable e intentar gustarle a los demás. Vale aclarar que cambiar de idea no solo es algo normal sino que también es signo de inteligencia y flexibilidad, pero solo cuando los argumentos del otro realmente nos han convencido.
– Sentirse triste o angustiado cuando los demás no aprueban tus ideas o comportamientos. Obviamente, cuando no encontramos apoyo no nos sentiremos felices pero si la tristeza que experimentamos es desproporcionada, probablemente en la base se encuentra la necesidad de aprobación.
¿Cómo deshacerse de la necesidad patológica de aprobación?
Básicamente, la necesidad de aprobación se combate cambiando las creencias que la sustentan:
1. Comprender que no podemos agradar a todos. Cada persona es única, tiene sus gustos y preferencias por lo que no siempre podremos encontrar suficientes puntos de convergencia, no siempre podemos caer bien y, sobre todo, no debemos ni siquiera tener esa expectativa.
2. Tú eres tan importante como los demás. Tu opinión vale porque, a fin de cuentas, ¿quién te conoce mejor que tú? Las personas pueden emitir críticas o darte consejos pero eres tú quien toma las decisiones.
3. El rechazo a una idea o un comportamiento no es un rechazo a tu persona. Normalmente quienes necesitan aprobación constante confunden sus comportamientos con su “yo”. Es decir, el hecho de que te hayas equivocado al hacer algo no significa que seas una persona torpe o poco inteligente, significa simplemente que has cometido un error.
✨Sentis habitualmente ésta necesidad? Contame en comentarios
✨Te sirve esta info? guardala o compartila con tus afectos!