19/06/2025
En cada aplicación de toxina botulínica el cuerpo reacciona y desarrolla inmunidad contra ésta. Si se aplica bótox con demasiada frecuencia (antes de los 4 meses), el organismo puede reaccionar produciendo anticuerpos contra la toxina, lo que puede disminuir o anular su efecto en aplicaciones futuras.
Así con cada aplicación se tiene menor efecto. Por esta razón, hay que respetar un intervalo, cierto período de tiempo, en la aplicación de la toxina, de alrededor de 4 meses.
No hay mini retoques entre una aplicación y otra. Se aplica un día, entre el día 10 y 14 se hace el control y ahí se puede hacer alguna modificación. A partir de ese día, se debe esperar 4 meses para una nueva recolocación.
Al dejar pasar este tiempo, los músculos faciales recuperan gradualmente su movilidad, lo que permite evaluar la necesidad de un nuevo tratamiento y ajustar la dosis si es necesario.