Espacio Biocéntrico Punilla Centro. Este espacio está pensado para la difusión y promoción de distintas actividades biocéntricas de la región, como la divulgación del principio biocéntrico y biodanza, como así también la promoción de actividades, talleres, encuentros y grupos regulares de biodanza, y todas las actividades que tengan como eje central, la protección de la vida del medio que nos cont
iene y contenemos. El Principio Biocéntrico tiene como punto de partida la vivencia de un universo organizado en función de la vida. Todo cuanto existe en el universo, sean elementos, astros, plantas o animales, incluyendo al hombre, son componentes de un sistema viviente mayor. El universo existe porque existe la vida. Y no a la inversa. Las relaciones de transformación materia-energía son grados de integración de vida. Consiste en una propuesta de reformulación de nuestros valores culturales que toma como referencia el respeto por la vida. Biodanza emplea una metodología vivencial, dando énfasis a la experiencia vivida, más que la información verbal, permite comenzar la transformación interna sin la intervención de los procesos mentales de represión. El Principio Biocéntrico constituye el paradigma que podrá servir de fundamento a las Ciencias Humanas del futuro: Educación, Psicología, Jurisprudencia, Medicina y Psicoterapia, entre otras. El Principio Biocéntrico sitúa el respeto a la vida como centro y punto de partida de todas las disciplinas y comportamientos humanos; Restablece la noción de sacralidad de la vida. Desde el Principio Biocéntrico podemos concebir el universo como un gigantesco holograma vivo. La experiencia de la unidad mística y de la Identidad Suprema, es para nosotros perfectamente válida. Podemos descubrir en esta vivencia fundadora, las raíces de una cultura de la vida. La desconexión de los hombres de la matriz cósmica de la vida ha generado, a través de la historia, formas culturales destructivas. La disociación cuerpo-alma y ha conducido a la profunda crisis cultural en que vivimos. Si tomamos como punto de partida las propuestas intrínsecas que surgen del acto de vivir y de la comunicación con los seres vivos, tenemos que abandonar, con decisión absoluta cualquier tipo de fundamentación culturales basada en el dinero y en el asesinato. Los intereses de la vida no siempre se conjugan con las exigencias de nuestra cultura. Así por ejemplo todo el delirio jurídico de Oriente y occidente con sus códigos y tribunales de justicia se basan en la propiedad privada, no en la vida. Las guerras son también la expresión de esapsicosis colectiva que niega la sacralidad de la vida. La cultura debería estar organizada en función de la vida. Nuestras formas culturales son Anti-vida. El Principio Biocéntrico, por lo tanto, surge de una propuesta anterior a la cultura y se nutre de los impulsos que generan procesos vivientes. Este planteamiento es biocosmológico y no antrópico, cosmológico o teológico. El Principio Biocéntrico, propone la potenciación de la vida y la expresión de sus poderes evolutivos. Biodanza es, desde este punto de vista, una poética de lo viviente, fundada en las leyes universales que conservan y permiten la evolución de la vida. Todas las acciones de Biodanza se orientan en resonancia con el fenómeno profundo y conmovedor de la vida. La salud vista desde la perspectiva biocéntrica es un concepto de vida, positivo y colectivo, pues considera como referencia mayor el potencial de vida y la experiencia acumulada presente en cada habitante. Ve al individuo como sujeto de la realidad, ciudadano, capaz de aprender a cuidar cada vez mejor, de su salud, de la salud de los otros y de la naturaleza, que en ellos está presente, lo envuelve como un potencial natural. Por lo tanto es una acción potencializadora del individuo y de la comunidad para cuidar de sus habitantes y del medio ambiente. Busca de ese modo responder a la multidimensionalidad de la salud en sus constituyentes ecológicos, sociales, orgánicos y psicológicos que afectan a las personas en su lugar de vivienda, convivencia y comunidad. La educación vista desde la perspectiva biocéntrica, educación centrada en la vida, transforma el antiguo concepto antropocéntrico, en una educación en la que se aprende a vivir, a conectarse, a desarrollar la afectividad y la creatividad, desarrollando la inteligencia afectiva y no solo los intereses intelectuales como el conocimiento meramente intelectual, basado y transmitido desde el lenguaje teórico. Hay que considerar al individuo como un complejo bio-psico-social, como nuevas propuestas de educación como un proceso que ayude a las personas a aprender a vivir y convivir, teniendo como punto de partida el respeto a la vida y la convivencia amorosa y como método un enfoque reflexivo y vivencial en la práctica pedagógica. Entre los objetivos de esta propuesta, está el de generar, a mediano plazo, un mundo de paz, ya que para ROLANDO TORO, Psicologo, Antropólogo y creador del sistema Biodanza, "la educación actual se basa en el intelecto y en la aplicación de tecnologías, conduciendo muchas veces a la pérdida de sentido. Lo que proponemos, entonces, es centrar las actividades educacionales en torno a la vida, convirtiéndola en un centro teórico y metodológico", de esta manera se contempla la integración de la inteligencia conceptual con la afectividad. La propuesta de trabajar desde la Educación Biocéntrica o Pedagogía del Encuentro, metodología creada por Ruth Cavalcante, psicopedagoga, y Cezar Wagner de Lima Góis, psicólogo; se nutre metodológicamente de los aportes de biodanza y toma los aportes más significativos del constructivismo (Piaget, E. Ferreiro, A. Teberosky, Vigotsky, Wiss, Edgard Morin, Paulo Freire, Moreno, etc) que reside en la capacidad de propiciar encuentros con profunda conexión afectiva (inteligencia afectiva) que moviliza y refuerza la identidad. A partir de la identidad individual se forma la identidad del grupo, por lo tanto, formar individuos con identidad saludable significa formar grupos también con identidad saludable, eso sin duda, favorecerá el proceso de transformación, es decir, correrse del paradigma de la autoexclusión para la inclusión, que se manifiesta en la vivencia de ciudadanía plena en su totalidad. La educación biocéntrica se enfoca en la construcción de un conocimiento crítico, su expresión exige una acción en el mundo a través del dialogo con el otro, para una transformación de la realidad individual y social, para la cual es preciso desarrollar la afectividad y la creatividad.