30/05/2025
Presentamos el caso clínico de un paciente con condiciones sistémicas y locales complejas, incluyendo maxilares atróficos secundarios al uso prolongado de prótesis removibles, con reabsorción ósea progresiva estimada entre 0.5 a 1 mm por año. Además, el paciente cursaba con diabetes mellitus tipo 2, lo que incrementa significativamente el riesgo quirúrgico debido a la disminución de la capacidad de cicatrización y el aumento del riesgo de infecciones. A esto se sumaba una hipertensión arterial relativamente controlada, situación que exige especial precaución durante la administración de anestésicos locales, ya que la vasoconstricción asociada puede desencadenar eventos cardiovasculares adversos.
Ante este escenario, optamos por realizar una cirugía guiada para la colocación de cinco implantes dentales, lo que nos permitió planificar con precisión la posición, angulación y profundidad de los implantes, reduciendo el tiempo quirúrgico y evitando incisiones extensas. Utilizamos mepivacaína sin vasoconstrictor, cuya duración fue adecuada para la cirugía (45 minutos), minimizando los riesgos hemodinámicos y reduciendo la posibilidad de complicaciones sistémicas. La cirugía guiada resultó en menor sangrado intraoperatorio, menor trauma tisular, y una recuperación posoperatoria significativamente más favorable. Este abordaje demuestra cómo la planificación digital y la tecnología pueden optimizar la seguridad y los resultados en pacientes médicamente comprometidos.