13/11/2025
EL DÍA QUE ESCUCHASTE LA PALABRA CÁNCER, EL MUNDO SE DETUVO
No era solo un diagnóstico.
Era una palabra que partió tu vida en un antes y un después.
Todo se vuelve borroso: las voces, los nombres de los medicamentos, las fechas.
Y mientras todos hablan, tú solo piensas: “¿Voy a sobrevivir?”
No estás loca.
No estás exagerando.
Estás en shock.
Tu cuerpo y tu mente están tratando de procesar algo que ningún ser humano está preparado para oír.
Ese momento no es debilidad: es el comienzo de un proceso de adaptación biológica y emocional.
Tu cerebro activa todas sus alarmas: miedo, negación, enojo, silencio.
Cada emoción tiene una función: protegerte mientras te reacomodas al impacto.
A veces lloras sin entender por qué.
A veces sientes culpa por no “ser fuerte”.
Pero la fuerza no es no llorar.
La fuerza es seguir preguntando, seguir entendiendo, seguir viviendo un día más.
Los estudios, las biopsias, los resultados... no definen quién eres.
Solo son mapas.
Y tú sigues siendo quien decide.
A.A.
Cover image by Audra Geras