02/04/2025
La inspiración.
En las fotos; la Dra. Elizabeth Kubler Ross, fundadora de los cuidados paliativos; el Dr. Aaron Beck, Fundador de la terapia Cognitivo Conductual, la Dra. Cicely Saunders, Fundadora del Movimiento Hospice; la Dra. Marsha Linehan, Fundadora de la Terapia Dialéctica Conductual para el tratamiento de pacientes con Trastorno límite de la personalidad, la Dra. Margaret Mead, Famosa antropóloga cultural y la Dra. Jimmie Holland, fundadora de la Psicooncología.
Están en mi pared del consultorio. Tenía ése sueño desde hace mucho; tenerlos en ahí como una inspiración y recordatorio de quienes nos preceden; nuestros maestros y el por qué estamos aqui. Por qué hacemos lo que hacemos cada día en el trabajo en salud mental.
Cada uno se destaca más allá de sus títulos; se destacan por su profundo compromiso, vocación e interés por lo que hacian. Ellos lucharon contra todas las cosas al ser pioneros en sus áreas. Cuando nadie creía, ahí estaban ellos rompiendo límites. No siendo "grandes", sino haciendo un trabajo.
La Dra. Kubler Ross fue la primera en interesarse en los pacientes que morían ocultos en los hospitales y en hablar con ellos. Medio mundo la vio como una Dra. "rara" porque no era lo que un médico hacía. La señalaron, rechazaron...pero siguió. El Dr . Beck se atrevió a cuestionar terapias que eran respetadas en su tiempo con fervor y vehemencia como el conductismo y psicoanálisis, pero su enfoque era otro:encontrar una psicoterapia que "funcionara" y lo logró, trabajando. La Dra. Cicely tenía esa cercanía única con pacientes que iban a fallecer y vió lo que muchas personas en salud no se atrevian a ver: que las personas que fallecen también tienen necesidades, preocupaciones y necesitan un cuidado hasta el final de su último aliento. La Dra. Linehan se atrevió de trabajar con pacientes que los mismos psicólogos o psiquiatras consideraban perdidos o intratables en ése tiempo: con los pacientes con ideación suicida y a quienes llamaban "locos". Aquellos que habian intentado suicidarse tantas veces y generaban tanto malestar...pero ella estaba ahí. Adoro una parte de una entrevista suya donde alguien cuestiona sus métodos y ella dice "nunca me importaron tanto las reglas". Y pudo crear una psicoterapia que ahora funciona...y salva vidas. La Dra. Mead, antropóloga, me muestra la riqueza de aprender, salir de mi propio pensamiento y atreverme a vivir entendiendo la riqueza de las diferencias culturales maravillándome con ello. Ella se atrevió a ello cuando viajó y vivió en otra cultura cuando las mujeres (o cualquiera) no se atrevian a hacer aquello. Y la Dra. Holland me enseñó a retarte a trabajar en un mundo médico donde eres el único "loco" psicólogo que ve cosas psicológicas donde domina la enfermedad...pero a crecer entre los increíbles médicos y profesionales en salud. Me enseñó a que el cáncer si se puede combatir desde la salud mental porque el cáncer también afecta en la mente y el entorno familiar.
Por eso tengo fotos de ellos a un lado también. En ellos, no están con trajes o títulos, sino trabajando, con esa fortaleza y vocación detrás que cambió el mundo, o al menos el mundo de psicólogos como yo.
Ellos son nuestros maestros, pero también nos enseñan que nosotros debemos serlo, con nuestra gente, en nuestros países, con los retos de nuestro propio tiempo.
Ellos me miran todos los días y por eso recuerdo el por qué en cada paciente, cada caso y en la vida.