27/08/2024
Un cerebro con niveles bajos de dopamina puede volverse más susceptible a las adicciones. La dopamina es un neurotransmisor clave en el sistema de recompensa del cerebro, el cual está implicado en la motivación, el placer y el refuerzo de conductas. Cuando los niveles de dopamina son bajos, una persona puede buscar comportamientos o sustancias que aumenten temporalmente la liberación de dopamina, como las dr**as, el alcohol, el juego o la comida, lo que puede llevar a un patrón adictivo. La falta crónica de dopamina también puede estar relacionada con trastornos como la depresión y la anhedonia (incapacidad para experimentar placer), lo que refuerza la búsqueda de estímulos externos para compensar esta deficiencia.