14/05/2025
“Para amar con todo el corazón, una mujer tiene que estar fuerte y, de ser necesario, detener por completo el alud.”
– Clarissa Pinkola Estés, Mujeres que corren con los lobos
Amar desde el alma es un acto de valentía. No es entrega ciega, ni olvido de una misma. Es un vínculo profundo que nace cuando una mujer ha regresado a su centro, ha abrazado sus cicatrices y ha recordado su poder.
Desde la psicología, comprendemos que el amor sano requiere límites firmes, conciencia plena y una profunda conexión con nuestra autenticidad.
Cuando una mujer se ha reencontrado con su esencia, puede amar con todo el corazón… pero también puede decir “no” al caos, al desborde, a aquello que amenaza con arrasar su mundo interior.
Detener el alud no es un acto de dureza, sino de sabiduría. Es el alma salvaje diciendo: “Hasta aquí. Yo también importo.”
Que esta frase te recuerde que el amor verdadero empieza por una misma, y que para sostener el corazón abierto, también es necesario aprender a protegerlo.