09/11/2025
Y su cerebro cambia, es verdad, pero cuando llega bebé a casa los recursos mentales deben ahora reorganizarse para incluir nuevas cámaras que monitoricen - en el fondo de nuestra mente- (las tomas de leche, el cambio de pañal eterno, las vacunas, las siestas que siempre se van modificando y un largo etc que luego se convertirá en salidas pedagógicas, los disfraces de halloween, los exámenes, el grupo de whatsApp del colegio, los cumpleaños todos los fines de semana, el volcán para el colegio, la tarea de tecnología y nuevamente un montón de etc).
Todo esto ocurre mientras intentas mantener el mismo rendimiento que antes en tu vida personal y laboral. A más carga cognitiva, menos recursos podremos dedicas a cada una de las tareas, lo que implica que probablemente las ejecutemos peor, cometamos errores o directamente nos olvidemos.
No es un tema de “no querer”, es que no se puede llegar a todo considerando el gran aumento de carga cognitiva que trae consigo la crianza y los cuidados de un recién nacido, bebé, niño o niña en etapa temprana (y bueno, en todas las etapas. Cada una trae sus propios desafíos).
Esto ha ido cambiando con los años, pero en sesión siguen apareciendo: falta de manos, coparentalidad y corresponsabilidad. Tenemos que seguir trabajando para que eso suceda y la carga mental sea compartida por la salud integral de todos en casa.
Fuente: Neuromaternal.