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                                            Todo año tiene su desafío, su propuesta y su promesa. 
2024 nos presenta el desafío de conectar con el mundo invisible para plasmarlo en el plano de lo visible. Nos invita a mirar hacia adentro, reconocer la verdad interior de manera sabía para luego tener una acción concreta en coherencia con la verdad interior y luego materializar.
Nos propone tener en cuenta y nunca olvidar que toda causa tiene  su efecto, que del génesis de las cosas cosecharemos, dicho de otra manera ; lo que siembres cosecharás. No se puede plantar un manzano y coger un peral. Es imposible odiar y pretender vivir en Amor, mentir y experimentar Verdad, practicar deslealtad y recoger Lealtad.
La propuesta es tener en cuenta que lo bueno te lleva al bienestar y lo malo al malestar, es así que se nos invita a practicar esta sabiduría y a comprender que todo lo que va , vuelve.
Es un año de retribución entendiendo que recibirás lo que hayas sembrado.
La promesa es justamente eso, podrás g***r de la abundancia de esta retribución de todo lo que hayas dado.
Recordar que la promesa siempre ha sido el Amor, pero la ley siempre ha sido ceñirse a esta Ley para poder disfrutar de sus dones y bendiciones.
En tu corazón está codificada la Ley del Amor, reconectarse interiormente para vivirla en su máxima expresión.
Volver a quién eres, observarte, aceptarte, amarte y actuar en consecuencia.
Es una año de justicia infinita, nada queda sin ser visto.
También un año para organizar y estructurar lo caótico, tanto interior como exterior.
Un año especialmente que nos mostrará lo que mueve a los grupos de poder, gobernantes, gobernadores tanto de países, empresas y dirigentes de cualquier tipo. Se verá lo que está bajo lo aparente.
Es un año que da gran fuerza a lo masculino y paterno entendiendo esa energía y vibración de protección, organización y practicidad. Sin embargo está inclinación deberá estar en armonía con lo amoroso, sabio y sutil. Nada en equilibrio brotará si no se consideran los movimientos internos.
Por ello es importante conectar con la intuición y el instinto.
La autoridad verdadera estará sometida a la conexión contigo mismo y no a la obediencia irreflexiva y basada en la obediencia ciega.
Un año para conectar con la propia sabiduría e indagar en el autoconocimiento.
Un año para crecer y materializar, un año para conocerte a ti mismo en verdad y honestidad, un año para conectar con la fuerza interior, un año para desmantelar la mentira, un año para reconectar con lo paterno y mejorar lo que haya que mejorar con esa figura. Un año para comprender y practicar leyes como el dar y recibir,  la ley de causa y efecto y con el gozo de hacer las cosas bien.
Ten en cuenta que Dios puso todo el conocimiento de lo creado dentro de ti, la acción es conectar para poder aprender de aquello que  es para tu crecimiento.
Recordar que lo material tiene su origen en lo inmaterial, recordar que lo espiritual e invisible crea lo material y visible.
Te invito a sembrar buena semilla para que disfrutes de una cosecha llena de gozo.
Que Dios te Bendiga.                                        
 
                                         
   
   
   
   
     
   
   
  