
19/06/2025
Cuando el hombre se convierte en el padre de su mujer...
En algunas relaciones, sin notarlo, el hombre deja de ser pareja para transformarse en una figura paterna. Comienza a cuidar a su mujer como a una niña, a decidir por ella, corregirla, protegerla de todo, incluso de sí misma.
Y a ella, le acomoda esa posición por heridas o vacíos del pasado, se deja cuidar, se deja guiar… hasta que deja de ser mujer y empieza a comportarse como una hija.
Esto puede ser una forma inconsciente de revivir vínculos infantiles no resueltos. Ella busca al padre que le faltó, y él encuentra sentido al “ser necesario”. Ambos en un juego inconsciente de reparación, que no les permite realizar su verdadero rol en la pareja.
Pero cuando esto pasa, el deseo se enfría, la intimidad se rompe, y la pareja comienza a perder su equilibrio.
El amor adulto necesita mirarse de igual a igual. Ni él es su padre, ni ella su niña. Son dos personas completas, con heridas, claro, pero con la capacidad de construirse desde la honestidad y la libertad, no desde la carencia.
Hay que identificar estos roles... no es para culpar, sino para sanar. Y muchas veces, amar bien implica bajarse del pedestal, dejar de salvar, y aprender a caminar juntos, no uno delante del otro.
Reconocer cuál es el verdadero motivo por el cual ocupo ese rol, que en la dinámica de pareja no me corresponde...