10/01/2016
Y llegó el verano amigos de Facebook¡ Hablemos sobre protección solar para disfrutar del verano sin riesgos¡
Nadie pone en duda que el sol es imprescindible para que haya vida en la Tierra, al mismo tiempo que todo el mundo asegura que un exceso de sol sin protección puede tener efectos muy nocivos para las personas. La sociedad actual asimila bronceado con salud, y no siempre están relacionados.
El sol que incide en la piel sin protección provoca daño de diferente manera de acuerdo a qué tipo de ración produce. La radiación UVB es la radiación intensa de alta energía presente con altas temperaturas en verano y que ocasiona las quemaduras solares. La radiación UVA esta siempre presente ya que se encuentra en el espectro de la luz visible, por lo tanto estamos expuestos a ella todo el tiempo incluso en invierno, atraviesa la nubes y los vidrios. Si bien tiene menos energía que la UVB, daña a nivel más profundo y es la principal responsable del envejecimiento cutáneo prematuro, arrugas, manchas y cáncer de piel en zonas expuestas. Es por esto que se recomienda usar un buen fotoprotector todo el año. Recuerde que el daño solar es acumulativo, es decir el daño que Ud. tiene hoy corresponde al que ha acumulado en toda su vida.
Para minimizar todas estas consecuencias nocivas, se recomienda considerar las siguientes recomendaciones:
- La sombra, las gafas de sol, las prendas de vestir y los sombreros son la mejor protección. Además, es necesario aplicarse un buen bloqueador solar en las partes del cuerpo que quedan al descubierto, como el rostro, orejas, cuello, escote y las manos.
- Nunca debe utilizarse la crema con filtro solar para prolongar la exposición al sol (bronceadores) y tampoco los Solariums los que por sí solos CAUSAN cáncer de piel.
- Evitar la exposición solar en las horas centrales del día. Los rayos UV solares son más fuertes entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde. Tenga especial cuidado con la exposición al sol durante esas horas.
- Aproveche las sombras. Póngase a la sombra cuando los rayos UV sean más intensos, pero no olvide que los árboles, las sombrillas o los toldos no protegen totalmente contra la radiación solar.
- Use ropas que le protejan. Un sombrero de ala ancha protege debidamente los ojos, las orejas, la cara y la parte posterior del cuello. Las gafas de sol con un índice de protección del 99%-100% frente a los rayos UVA y UVB reducen considerablemente los daños oculares debidos a la radiación solar. Las prendas de vestir holgadas y de tejido tupido que cubran la mayor superficie corporal posible también protegen contra el sol.
- Bloqueador solar: Aplíquese el indicado por su dermatólogo, póngase el producto generosamente sobre la piel expuesta y repita la aplicación cada dos horas, o después de trabajar, nadar, jugar o hacer ejercicio al aire libre.
- Proteja a los niños. Los niños son más vulnerables a los riesgos ambientales que los adultos. Cuando estén al aire libre, hay que protegerlos de la exposición a los rayos UV como ya se ha explicado. Los bebés deben permanecer siempre a la sombra.
Ante dudas o consultas debe consultar con su dermatólogo. Es recomendable realizar un chequeo de sus lunares y su daño solar acumulado al menos 1 vez por año y más frecuentemente si Ud. ha tenido un cáncer de piel de cualquier tipo o tiene antecedentes familiares de cáncer cutáneo.
Cuide su piel, solo tiene una.
Equipo Clínica Dermosalud