19/11/2025
Ana Maria Lajusticia historia de lucha y superación que iluminan nuestro camino. Esta es una de esas historias, una que inicia con un diagnóstico… y florece en libertad.
Le dijeron “artrosis severa” a los 31.
Un futuro incierto la envolvía.
Dolor constante. Rigidez asfixiante.
La vida, atrapada en un corsé de varillas durante más de dos décadas.
Pero su corazón rebelde no se rindió.
Química de vocación, su espíritu inquisitivo buscó respuestas en la ciencia.
Exploró el poder del magnesio y del colágeno en el cuerpo.
Cada descubrimiento, un rayo de esperanza.
Paso a paso, menos dolor.
Paso a paso, más movimiento.
A los 52 años, desafió todas las expectativas médicas y consiguió quitarse el corsé. El momento fue inolvidable.
Y entonces, el latido de su corazón tomó una decisión valiente: transformar el conocimiento en propósito. Compartir sus aprendizajes para que otros vivan con menos dolor y más esperanza.
Ese es el legado que nos inspira y nos trasciende.
¿Conocías esta parte de su historia?
Nos encantaría leerte en los comentarios.
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