04/06/2019
AUTOCOMPASIÓN Y DOLOR CRÓNICO
Sabemos que el dolor crónico afecta la vida de las personas en diferentes formas, afectando negativamente aspectos físicos y psicológicos de las personas que los sufren, sin embargo, todavía existen muchas áreas sobre las cuales no tenemos información concluyente sobre cómo estas se asocian al dolor crónico. Una de estas áreas es la autocompasión.
La autocompasión, como la define Kristen Neff, consta de 3 componentes, la autoamabilidad, el mindfulness y la humanidad común. La auto amabilidad se entiende como la amabilidad y entendimiento hacia uno mismo, particularmente en instancias de dolor y sufrimiento. La humanidad común habla de percibir nuestra experiencia como parte de una experiencia humana más grande, en vez de como separada o aislada. Y el mindfulness se relaciona a la habilidad de mantener los pensamientos y experiencias dolorosos en la conciencia, en lugar de sobre identificarnos con ellos, es decir, sin que se roben toda nuestra atención. Es por ello que la autocompasión se ha asociado a niveles más altos de resiliencia emocional y afectos positivos, y con niveles más bajos de depresión, catastrofismo y discapacidad relacionada al dolor entre aquellos con dolor crónico. Sin embargo, la investigación en enfocada en autocompasión en el contexto de dolor crónico es limitada, por eso, esta investigación busco entender mejor el rol de la autocompasión en medidas de funcionamiento en adultos con dolor crónico que se presentan para un tratamiento interdisciplinario de dolor.
A través de diversos cuestionarios, se evaluó la aceptación del dolor, el uso de estrategias de afrontamiento para el dolor, el éxito en actividades basadas en valores, gravedad de la depresión, ansiedad relacionada al dolor, y la discapacidad física y psicológica, observándose que la auto compasión se asoció positivamente con la aceptación del dolor, el uso de estrategias de afrontamiento, y el éxito en las actividades basadas en valor, y se asoció negativamente con la severidad de la depresión, la ansiedad por dolor y la discapacidad física y emocional. Pero como sabemos, asociación no significa que haya causalidad entre la autocompasión y las variables analizadas, por lo que, aunque esto contribuye a la investigación, es solo un paso más.
COMENTARIO PERSONAL
La autocompasión dentro del contexto del dolor crónico, nos hace enfocarnos nuevamente en otros factores relacionados a la persona con dolor, donde esta debe ser un factor relevante, como en la toma de decisiones compartida y el planteamiento de objetivos, por nombrar algunas, y también nos recalca que no debemos necesariamente enfocarnos solo en la reducción del dolor, sino que también podemos ayudar a las personas con dolor al mejorar su calidad de vida, la cantidad de actividades que pueden realizar a pesar del dolor, pues muchas veces no podremos ayudar a disminuir el dolor, pero si podremos lograr que la persona realice actividades que le sean significativas, y eso puede ser un logro aún mayor. Aprendamos a ver estos logros en las personas con dolor, y seamos cada vez más guías y acompañantes para ellos, y menos superhéroes.
Link: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/31115099
Kinesiólogo Pablo Neira S.