15/03/2025
Amado y amada de Dios. ❤️
Hoy quiero hablarles sobre un pasaje que, aunque puede parecer un poco complicado al principio, tiene un mensaje poderoso para nosotros. Levítico 6:12, dice: “Mientras tanto, el fuego se mantendrá encendido sobre el altar; no deberá apagarse. Cada mañana el sacerdote pondrá más leña sobre el altar, y encima de este colocará el holocausto para quemar en él la grasa del sacrificio de comunión.”
Primero, quiero que piensen en el fuego. ¿Alguna vez han encendido una fogata con amigos? Ese fuego es cálido, acogedor y nos une. En la Biblia, el fuego también simboliza la presencia de Dios y su amor por nosotros. Así que, cuando leemos que el fuego en el altar debe arder continuamente, nos está recordando que nuestra relación con Dios debe ser igual de constante y vibrante.
Sé por experiencia propia que a veces puede ser difícil mantener esa chispa viva, especialmente en un mundo lleno de distracciones. Pero aquí está la buena noticia: ¡no estamos solos en esto! Dios nos invita a acercarnos a Él, a avivar ese fuego en nuestros corazones.
¿Cómo lo hacemos? A través de la oración, la lectura de la Biblia y, sobre todo, al compartir nuestro amor por Jesús con los demás.
Imagina que cada vez que eliges ser amable, perdonar o ayudar a alguien, estás echando leña al fuego de tu fe. Cada pequeño acto cuenta y hace que ese fuego brille más intensamente. Y cuando compartimos ese fuego con nuestros amigos y familiares, ¡se convierte en una fogata que puede iluminar a muchos!
Así que, te animo a que mantengamos ese fuego ardiendo. No dejemos que las preocupaciones o las dudas lo apaguen. Recuerda que Dios está siempre ahí, listo para avivar su llama. ¡Somos la generación que puede encender el mundo con el amor de Jesús!
Mantengamos ese fuego vivo, y verás cómo nuestra vida se transforma y cómo podemos impactar a quienes nos rodean. ¡Estamos llamados a ser portadores de luz y amor en este mundo!
Aceptas unirte a la aventura de ser portador de la luz de Dios???? 🙏❤️🔥