01/05/2025
Hoy quiero compartir con ustedes algo que utilizo frecuentemente en mis conferencias y es un manifiesto...
MANIFIESTO: EL VERDADERO SENTIDO DE LA PALABRA AMIGO
Por Manuel Darío Carvajal Trillos
Durante años hemos dicho la palabra "amigo" sin detenernos a saborearla. Sin preguntarnos, con la curiosidad del alma, qué significa realmente llamar a alguien así. Hoy quiero compartir una visión distinta, una lectura emocional, filosófica y simbólica de esta palabra que atraviesa corazones.
Etimológicamente, “amigo” viene del latín amicus, derivado de amare, es decir, “el que ama”. Pero hoy no quiero hablar solo desde el diccionario. Quiero hablar desde el alma, desde la experiencia, desde la transparencia de los vínculos que sanan.
Para mí, “amigo” se descompone en tres partes fundamentales:
“A”, como prefijo que significa sin.
“Mi”, que representa lo propio, lo mío, mi yo más íntimo.
“Ego”, ese yo inflado que tantas veces nos aleja de lo esencial.
Así, amigo es aquel con quien puedo estar sin mi ego.
Sin escudos, sin disfraces, sin exigencias de demostrar, controlar o proteger.
Es quien me permite ser, sin tener que explicar quién soy.
Es quien me ve sin adornos, y aún así se queda.
Es quien ama lo que soy, y no lo que aparento.
Amigo es sin mi ego. Amigo es presencia auténtica. Amigo es libertad emocional.
En un mundo donde tanto se negocia, se compara y se compite, el verdadero amigo es un refugio. Es el abrazo que no juzga. Es la palabra que no hiere. Es el silencio que acompaña. Amigo es quien te permite recordar que no estás solo ni siquiera cuando crees estarlo.
Por eso, yo declaro hoy que un amigo no es solo el que ama, sino también el que permite que yo ame sin miedo, sin máscaras y sin ego.
Y tú… ¿con quién puedes ser sin tu ego? A esa persona, no lo dudes: llámale amigo... y hoy puedo decir que mi esposita es mi mejor amiga...