Psicologia experta en Adicciones

05/12/2025

Fundación La Vida es Bella – Un Día a la Vez

Recuperarse es posible. Vivir en libertad también.

En la Fundación La Vida es Bella acompañamos a personas y familias afectadas por la adicción a reencontrarse con una vida digna, plena y con propósito. Nuestro enfoque se basa en el Modelo Minnesota, un modelo reconocido a nivel mundial por integrar el trabajo clínico, psicológico, espiritual y comunitario, siempre desde la honestidad, la responsabilidad y el apoyo mutuo.

Aquí creemos profundamente que la recuperación no es un evento, sino un camino, y ese camino se recorre un día a la vez.

En nuestro programa, cada paciente descubre que es posible:

*Reconstruir su vida desde la verdad y la aceptación.

*Romper con los patrones destructivos y recuperar el control.

*Fortalecer la autoestima y los valores que sostienen la sobriedad.

*Encontrar apoyo en una comunidad que comprende, acompaña y nunca juzga.

*Reconectar con la familia, el proyecto de vida y la esperanza.

La Vida es Bella es un espacio seguro, humano y profesional, donde cada persona aprende que la adicción no define su historia, y que siempre existe la posibilidad de volver a empezar.

Si tú o alguien que amas necesita una oportunidad real de cambio, estamos aquí para ayudar.

Porque vivir limpio es posible.
Porque volver a creer también.
Porque la vida, sí… es bella.

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Pronto podrás recuperarte en el mejor espacio, con el mejor programa y con la mayor confidencialidad

27/11/2025

Recuperarse con gratitud 24 - Noviembre
«Empezamos entonces a alimentar la idea de que estar limpios no valía la pena y nuestra vieja forma de pensar se ocupó de estimular la autocompasión, el resentimiento y la ira.»
Texto Básico, pp. 118 - 119
Hay días en que algunos nos sumimos en la autocompasión. Resulta fácil. Quizás tengamos expectativas de cómo debería ser nuestra vida en recuperación, expectativas que no siempre se cumplen. Tal vez hayamos intentado controlar a alguien sin éxito o pensamos que nuestras circunstancias deberían ser diferentes. A lo mejor nos comparamos con otros adictos en recuperación, y nos parece que estamos peor. Cuanto más intentamos que la vida se ajuste a nuestras expectativas, más incómodos nos sentimos. La autocompasión proviene de vivir en base a expectativas en lugar de vivir en el mundo tal como es en realidad.
Cuando el mundo no coincide con nuestras expectativas, por lo general son estas últimas las que deben ajustarse, no el mundo. Podemos empezar por comparar nuestra vida de hoy con la de antes, y estar agradecidos por nuestra recuperación. Podemos ampliar este ejercicio de gratitud, si repasamos todas las cosas buenas que tenemos en nuestra vida y damos las gracias de que el mundo no se ajuste a nuestras expectativas, sino que las supera. Si seguimos trabajando los Doce Pasos, cultivando cada vez más gratitud y aceptación, el futuro nos reserva más crecimiento, felicidad y paz de espíritu.
Hemos recibido mucho en recuperación; mantenemos limpios ha valido la pena. La aceptación de nuestra vida nos libra de nuestra autocompasión.
Sólo por hoy:
Aceptaré mi vida tal cual es con gratitud.

27/11/2025

Las 12 promesas del programa de Alcohólicos Anónimos (AA) son:

1. *Conoceremos una nueva libertad y una nueva felicidad*: Experimentaremos una sensación de liberación y felicidad que no conocíamos antes.
2. *No nos lamentaremos del pasado ni desearemos cerrar la puerta a él*: Aprenderemos a aceptar el pasado y a no dejar que nos defina.
3. *Comprenderemos el significado de la palabra serenidad y conoceremos la paz*: Encontrarás paz y serenidad en tu vida.
4. *Independientemente de lo bajo que hayamos llegado, veremos cómo nuestra experiencia puede beneficiar a otros*: Nuestra experiencia puede ser útil para ayudar a otros.
5. *Desaparecerá el sentimiento de inutilidad y lástima por nosotros mismos*: Dejaremos de sentirnos inútiles y de compadecernos de nosotros mismos.
6. *Perderemos el interés en las cosas egoístas y nos interesaremos por nuestros semejantes*: Nos enfocaremos en ayudar a otros y nos desinteresaremos de las cosas egoístas.
7. *Se desvanecerá la ambición personal*: Nuestra ambición personal se transformará en un deseo de servir a otros.
8. *Nuestra actitud y nuestra visión de la vida cambiarán*: Cambiaremos nuestra forma de ver la vida y nuestra actitud hacia ella.
9. *Perderemos el miedo a la gente*: Dejaremos de tener miedo a las personas y nos sentiremos más seguros en nuestras relaciones.
10. *Perderemos el miedo a la inseguridad económica*: No nos preocuparemos por la seguridad económica.
11. *Intuitivamente sabremos cómo comportarnos en situaciones en las que antes nos sentíamos desorientados*: Sabremos cómo manejar situaciones difíciles.
12. *Repentinamente, nos daremos cuenta de que Dios está haciendo por nosotros lo que no éramos capaces de hacer por nosotros mismos*: Entenderemos que hay un poder superior que nos ayuda y nos guía.

Recuerda que estas promesas se cumplen gradualmente a medida que trabajas los 12 pasos del programa de AA.

24/11/2025

Lee esto… quizá hoy entiendas algo que llevas años cargando.👇

“No lo estás abandonando… lo estás regresando a sí mismo.”

A lo largo de mi trabajo he escuchado a cientos de madres decir:
“Es mi hijo, no lo puedo abandonar.”
“Voy a estar con él hasta el final.”

Y lo entiendo… porque una madre ama con todo lo que es, incluso con lo que duele. Pero también he visto algo más: cuando una madre confunde amor con rescate, su hijo se pierde un poco más.

Porque sí, tú estás ahí…
Pero él no.

Y ahí es donde comienza el verdadero conflicto emocional:
Crees que soltarlo es dejarlo solo, pero en realidad, aferrarte lo aleja de él mismo.

Muchos hijos adictos crecieron escuchando un amor que lo resuelve todo: “yo te cuido”, “yo veo cómo le hago”, “yo te s**o del problema”.
Y sin querer, ese amor se convirtió en una sombra que los protegió tanto… que les costó aprender a enfrentarse.

Por eso, cuando tú dices:
“No puedo abandonarlo”
yo te respondo:

“No lo estás abandonando… lo estás regresando a sí mismo.”

Le estás devolviendo su vida, su responsabilidad, su dolor, su conciencia.
Le estás recordando que también es un adulto y que la recuperación no se construye con mamá rescatando, sino con él decidiendo.

🔥 “El día que tú sueltes, quizá él por fin se agarre de su propia vida.”

Muchas madres creen que estar “hasta el final” significa cargarlo siempre.
Pero estar hasta el final también puede significar poner un límite, cerrar la puerta con amor, dejar que la consecuencia le toque… y confiar en que la caída no lo destruye, lo despierta.

Porque a veces, mamá:
No es que él necesite más de ti…
es que necesita más de sí mismo.

Y tú no puedes dárselo.

Lo único que puedes darle —lo más poderoso—
es el permiso de encontrarse.
De tocar su fondo.
De hacerse responsable.

Y sí… duele.
Duele porque soltar es la forma más madura de amar.
Duele porque cada límite parece una traición.
Duele porque te enseñaron que una buena madre nunca se retira.

Pero hoy te digo algo que tal vez nadie te ha dicho con claridad:

✨ Soltar no es rendirte. Es amar sin destruirte.
✨ Poner límites no es abandono. Es enseñarles a vivir.
✨ Dejar de rescatar no es desamor. Es respeto.

Hoy quiero que entiendas esto con el corazón:
Tú no lo sueltas para que se pierda…
lo sueltas para que se encuentre.

Y ese es el acto de amor más valiente que existe.

Kalefh

Psicólogo en adicciones

Whatsapp 443 227 1958

21/11/2025

21/11/2025

Te pido que leas está reflexión 👇

🌿 La adicción es el llanto no escuchado

Siempre he dicho que una adicción no aparece de la nada.
No es un capricho.
No es una falta de voluntad.
No es “porque quiso”.

La adicción, en el fondo, es un llanto… pero uno que nadie escuchó a tiempo.

Porque antes del consumo hubo una herida.
Antes de la droga hubo un silencio.
Antes del desastre hubo un niño buscando a alguien que pudiera verlo, contenerlo, sostenerlo.

Pero no llegó nadie.
Y cuando no llega nadie, el dolor se queda solo…
y un dolor solo busca cualquier cosa que lo anestesie.

Las sustancias no seducen por sí mismas; seducen porque prometen llenar un vacío que ya estaba ahí.

A veces ese llanto lleva años escondido:
un abandono emocional, un rechazo, un hogar donde no se podía hablar, un padre ausente aunque viviera en la misma casa, una madre que lo dio todo pero nunca se dio permiso de sentirse viva, una familia rota que aprendió a fingir que estaba bien.

Ese llanto se guardó tan profundo… que un día estalló.
Y la adicción apareció como un grito para decir:
“¡Mírenme! Ya no puedo más.”

Y aquí viene lo más duro:
muchas familias reaccionan al consumo…
pero nunca a la herida.
Atacan la conducta, pero ignoran el origen.
Se enfocan en el caos, pero no en el dolor que lo creó.

Y por eso repito una y otra vez:

✨ La adicción es el llanto que no supieron traducir.
✨ Es la voz ahogada del niño que el adulto sigue cargando por dentro.
✨ Es la forma más desesperada de pedir ayuda sin decir una palabra.

Cuando logramos escuchar ese llanto, sin juicio, sin miedo, sin querer controlarlo…
algo cambia.
Porque detrás de cada adicción hay una historia que necesita ser contada y un dolor que necesita ser nombrado para dejar de gobernar la vida.

No se trata de justificar.
Se trata de comprender desde un lugar más humano, más real, más profundo.

La recuperación nunca inicia cuando dejan de consumir…
inicia cuando alguien por fin escucha ese llanto.
Inicia cuando alguien sostiene al sujeto, no al síntoma.
Inicia cuando el adicto descubre que sí existe un lugar donde puede ser escuchado sin ser condenado.

Y hoy quiero que quede claro:

La adicción no es el enemigo.
El enemigo es todo lo que se tuvo que callar para que la adicción tuviera sentido.

Kalefh

Psicólogo en adicciones

WhatsApp 443 227 443 227 1958

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