08/05/2025
En 2017, la india Shreya Siddanagowder hizo historia al convertirse en la primera persona en Asia en recibir un trasplante de brazos por encima del codo, tras perder ambos en un accidente de autobús.
La operación, de 13 horas, se realizó en el Amrita Hospital de Kerala, con las extremidades de Sachin, un joven fallecido en un accidente de moto.
Al principio, las manos de Sachin se veían claramente diferentes: más grandes, masculinas y de tono más oscuro.
Pero con el tiempo ocurrió algo extraordinario: el cuerpo de Shreya comenzó a transformar esas manos.
Su piel se aclaró, los músculos se moldearon y las proporciones se ajustaron a su complexión femenina, un fenómeno aún en estudio que sugiere cómo el sistema inmunológico, hormonal y metabólico influye en los injertos trasplantados.
Más que una hazaña médica, su historia es un testimonio del poder de la adaptación humana… y de la vida que puede continuar gracias a la generosidad de un donante.
Crédito a quien corresponda
