
27/08/2025
Sentir y experimentar la primitiva naturaleza del ser, pálpito animal que corroe las venas con su furia pasional, enceguecedor ardor del deseo.
Promesa de placer al alcance de tus labios y el entregarse a la danza efímera del ahora.
Sudar con la sonrisa amplia, siempre al borde de la locura; sentir el goteo que se desplaza refrescante ante la temperatura fogosa del encuentro.
Suspirar y agradecer a las deidades para luego reclamar con ahínco las frustraciones de lo que no fue, por su resistencia todopoderosa a la perfección de un ahora tan erótico y tierno como el brillo pálido de tu piel y las estrellas.
Sentir y experimentar la primitiva naturaleza del ser. Enojo y consuelo. Su absurda entrega a la fe…