19/09/2025                                                                            
                                    
                                                                            
                                            Imagina un lugar escondido en el corazón del sur de Francia, donde la piel encuentra alivio y el alma, descanso. Ese lugar existe y se llama Centre Thermal Avène, un centro único en el mundo, dedicado a la dermatología y al arte de sanar a través del agua.
Su historia se remonta a 1736, cuando el marqués de Rocozel descubrió algo asombroso: su caballo, aquejado de una dermatosis persistente, encontró alivio al bañarse en un manantial de agua cristalina. Desde entonces, aquel secreto de la naturaleza se convirtió en una leyenda, y hoy es ciencia.
El agua termal de Avène recorre durante más de 50 años las profundidades de la tierra, en un viaje subterráneo que le otorga pureza y una composición inmutable. Cuando finalmente emerge, lo hace cargada de propiedades excepcionales: calmantes, suavizantes y antiirritantes. Es el regalo perfecto para las pieles más sensibles y para quienes enfrentan condiciones como acné, eccema, psoriasis, quemaduras, cicatrices o ictiosis.
En el Centre Thermal Avène, esa agua milagrosa se convierte en protagonista de protocolos médicos y terapéuticos. Hidroterapia dermatológica para mejorar afecciones cutáneas, tratamientos personalizados que combinan ciencia y bienestar, y espacios de relajación que invitan a desconectar del mundo exterior. Es un lugar donde la medicina se une con el spa, y donde cada paciente o visitante puede vivir una experiencia transformadora.
Avène no es solo un destino; es una historia de más de tres siglos, escrita en cada gota de agua que toca la piel y la devuelve a su equilibrio natural.